La piscina municipal de Peñuelas, en el distrito de Arganzuela, acoge este domingo el 'Día del Bañador Opcional', en el que los asistentes podrán prescindir de sus trajes de baño tanto en las piscinas como en las superficies adyacentes.
A las diez y media de la mañana ya había gente haciendo cola en la puerta de la piscina -abre a las once-, pero muchas de ellas no tenían intención de participar en esta iniciativa, que permite compartir el mismo espacio a quienes optan por prescindir del bañador y los que no.
Marina, quien se califica como "asidua" a esta piscina, ha asegurado a Efe que el día nudista "no le parece bien" porque es una piscina pública a la que acuden familias con niños que "no están acostumbrados a ver cuerpos desnudos". La misma idea tiene Manuela, quien afirma que "lo respeta pero no lo comparte" ya que no tiene porqué "ver cuerpos desnudos si no le apetece".
Ismael Rodrigo, presidente de la Asociación para el Desarrollo del Naturismo (ADN), ha explicado a Efe que esta iniciativa trata de romper con este estilo de pensamiento y asegura que trata de demostrar que la sociedad "tiene tolerancia con la desnudez, al igual que sucede con el topless".
"Es tan simple como explicar la capacidad de opción de si se quiere utilizar o no el bañador, porque esta es la forma más lógica y natural de entender el cuerpo humano", ha manifestado. La iniciativa que hoy se ha vivido en la piscina de Arganzuela no es una experiencia piloto sino que, desde hace varios años, se ha realizados días similares.
Rodrigo ha aclarado a Efe que la propuesta se bautizó en 2002 mediante un convenio de su asociación con la Comunidad de Madrid. En esta historia recatada aparecen también otras fechas: en 2010 la Piscina de la Complutense se abrió al naturismo y el año pasado la de Lago, en Casa de Campo.
El presidente de ADN reconoce, no obstante, que más allá de la experiencia madrileña, apenas hay nada que se le parezca, por lo que el amante del naturismo que quiera ejercer ha de ceñirse a las instalaciones o a los espacios municipales reservados y a los horarios fijados. "No queremos tener espacio reducidos y exclusivos sólo para nosotros, queremos que el nudismo se normalice en la sociedad", ha añadido.
La rutina de la piscina no se ha roto esta mañana del Día sin bañador. Las familias con neveras para pasar el día, los gritos de "ui, qué fría esta el agua", compartir crema solar y la búsqueda de un poco de sombra para mitigar el sol.
El pasado lunes, el director general de Deportes del Ayuntamiento de Madrid, Javier Odriozola, informó de que el evento de Peñuelas no es el primer Día con Bañador Opcional porque ya se ha celebrado este verano, en concreto el pasado 5 de junio, en el recinto municipal de la Casa de Campo.
Odriozola lamentó la polémica suscitada por esta iniciativa dado que se viene colaborando para el desarrollo del Día del Bañador Opcional desde la etapa del PP en el Gobierno municipal.