Los vecinos de la Ermita del Santo siguen en pie de guerra. No quieren que el actual centro comercial y deportivo de la zona se convierta en bloques de viviendas porque a su juicio eso masificará el barrio. Este domingo han protestado con una cacerolada contra el proyecto urbanístico, que el Ayuntamiento dice contribuirá a mejorar la zona y que contará además con equipamientos y zonas verdes.
El colectivo vecinal No al Pelotazo de Ermita del Santo, convocante de la protesta, ha acusado al Ayuntamiento de "ignorar la participación ciudadana y evitar la oportuna rendición de cuentas" y han calificado la situación global de los barrios de Los Cármenes y Puerta del Angel como "abandono histórico y especulación reciente".
La plataforma ha censurado que el proyecto "destruiría más de 4.000 metros cuadrados de zonas verdes consolidadas y de buena calidad, incluyendo parte del parque de la Cuña Verde de Latina, y eliminaría el camino peatonal que une la avenida de los Caprichos con el paseo de la Ermita del Santo creando a cambio una nueva vía para el tráfico rodado".
A la protesta se han sumado representantes del PSOE, Unidas Podemos y Más Madrid. Mónica García, portavoz y candidata de Más Madrid, ha asegurado que se trata de "otro intento de pelotazo" del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, tras lo que ha subrayado que tanto él como la presidenta de la Comunidad tienen como "único programa de Gobierno" el "especular, talar y contaminar".
En este sentido, ha rechazado que se plantee la construcción de nuevas "viviendas de lujo" y ha asegurado que buscan "lo contrario". "Que deje de ser un lujo y sea un derecho", ha señalado, al tiempo que ha recordado que como tal está recogido en la Constitución.
Por su parte, la candidata socialista a la Alcaldía de Madrid, Reyes Maroto, ha rechazado el "nuevo pelotazo" que, a su juicio, el regidor de la capital, pretende llevar a cabo en los terrenos del centro comercial y ha abogado por un modelo de ciudad "con los vecinos" y "no contra ellos".