La Policía Nacional registró palmo a palmo el piso en el que se cree que el presunto pederasta de Ciudad Lineal pudo cometer alguno de los cinco abusos a menores que se le imputan y trata de encontrar pruebas y restos biológicos que le incriminen.
Antonio Ortiz Martínez, que fue detenido ayer en Santander, ha tenido desde su arresto una actitud distante y de escasa colaboración y se ha mostrado "extremadamente tranquilo" preguntando únicamente "qué hace arrestado", según ha explicado hoy el jefe superior de Policía de Madrid, Alfonso José Fernández Díez.
"Se trata de un detenido extraño. Cualquier detenido como éste, que tiene experiencia delictiva, se mostraría alterado y deseando salir de esa situación. Pero él está extremadamente tranquilo", ha dicho el máximo responsable de la Policía de Madrid.
Ayer pasó el día en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía pero hoy, sobre las nueve de la mañana ha sido conducido al piso de la calle de Santa Virgilia, que su madre mantenía vacío y en el que supuestamente abusó de algunas de las niñas.
El máximo responsable la Policía en Madrid anunció por la mañana que "se removería la casa al completo" y "duraría mucho tiempo", ya que la prioridad ahora es encontrar restos biológicos y de cualquier otro tipo que demuestren la culpabilidad del arrestado.
Por eso los agentes buscan palmo a palmo el domicilio, revisando los desagües y tuberías, así como techos, paredes y juntas de toda la casa.
El resultado ha sido por el momento el hallazgo de restos de vómito que, a falta de examinar y cotejar con ADN de las víctimas, podrían ser de alguna de las niñas, han informado a Efe fuentes de la investigación.
Los agentes continuarán revisando el piso toda la noche si es necesario, según advirtió esta mañana el jefe superior de Policía.
HALLAN UN BOTE DE CREMA Y UNA MULTA
Este hallazgo se suma a los vestigios encontrados ayer en el piso en el que el detenido vivía con su madre, en el mismo distrito de Hortaleza, entre ellos el resguardo de una multa puesta a un coche de la marca Toyota que podría ser el que el agresor utilizó en al menos dos raptos.
Antes de estos dos registros la Policía ya había hallado restos de ADN y algunas huellas que ahora se examinan para determinar su origen y valorar la importancia que pudieran tener en la investigación.
En las últimas horas se ha sabido también que una de las claves para detener al pederasta fue su identificación en un control preventivo de los que había desplegados por el distrito de Ciudad Lineal, lo que le alertó y provocó que durante dos horas merodeara por el barrio.
La Policía paraba a hombres con unos rasgos determinados y entre ellos pidió la documentación a Antonio Ortiz, que a partir de ese momento mostró un comportamiento extraño que llevó a los agentes a seguirle y finalmente a identificarle como el presunto pederasta.
Poco después de esta identificación el sospechoso huyó a Santander, seguido por la Policía, que finalmente le arrestó ayer por la mañana.
La mayoría de los indicios contra él se tuvieron tras el último rapto el pasado 22 de agosto, ya que tras coger a la menor paró en doble fila para entrar a comprar una crema en un comercio, con una actitud que hizo sospechar a la tendera. Además, una cámara de un autobús de la EMT captó un fragmento del coche que llevaba ese día, un Citröen Xsara Picasso.
Una vez detenido y practicados los registros, dentro de unos días, la Policía hará una reconstrucción de los hechos con al menos una de las víctimas, según han informado a Efe fuentes de la investigación.
Las fuentes han precisado que, además, dentro de dos semanas se llevará a cabo una rueda de reconocimiento con el detenido.
Desde que el pederasta fue arrestado la Policía ha tomado declaración a la novia de Antonio Ortiz, que ha reconocido que en ocasiones le facilitaba tranquilizantes que ella tomaba porque su novio no podía dormir, y que nunca sospechó que fueran para otro fin.
INTERIOR PROPONE CONDECORAR A LOS 46 POLICÍAS QUE PARTICIPARON EN SU DETENCIÓN
El Ministerio del Interior ha propuesto condecorar a los 46 agentes de la Policía Nacional que han intervenido en la 'operación Candy' que condujo a primera hora de la mañana del miércoles a la detención en Santander del presunto pederasta que actuaba en la zona de Ciudad Lineal de Madrid.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha presidido la reunión extraordinaria de la Junta de Gobierno de la Policía Nacional, en la que se ha abordado, entre otros asuntos, la propuesta de concesión de estas 46 condecoraciones.
En concreto, se ha propuesto la concesión de seis cruces rojas y 40 cruces blancas a los policías que han participado en dicha operación. De esta forma, se reconocerá la labor de los agentes destinados en la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid y en las comisarías generales de Policía Judicial, Seguridad Ciudadana, Información y Policía Científica, así como a miembros del Grupo Especial de Operaciones (GEO).
El ministro del Interior ha expresado a los mandos policiales su satisfacción por esta operación, al tiempo que les ha pedido que hagan extensiva su más sincera felicitación a cada uno de los agentes que han intervenido en las investigaciones que han conducido a la captura del presunto pederasta.