El Retiro y otros parques de Madrid, en alerta roja este lunes por el viento

El Ayuntamiento de Madrid procederá al desalojo de los Jardines del Buen Retiro a partir de las 16.00 horas de este lunes como medida de prevención ante las fuertes rachas de viento anunciadas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) y en aplicación del Protocolo de gestión de incidencias y actuación ante la previsión de situaciones meteorológicas excepcionalmente adversas, ha informado el Consistorio en un comunicado.

Este protocolo se aplica también a otros parques que permiten su cierre: Quinta de Fuente del Berro, Quinta de los Molinos, Quinta Torre Arias, El Capricho, jardines de Sabatini, la Rosaleda del parque del Oeste, Juan Carlos I y Juan Pablo II.

La alerta se mantendrá hasta este martes 17 de diciembre, a las 6.00 horas, de mantenerse las condiciones actuales.

Fuertes rachas de viento

Según las previsiones de la AEMET, este lunes por la tarde se esperan fuertes rachas de viento con velocidades máximas de 66 kilómetros por hora, superiores a los 65 que marca el protocolo de El Retiro para activar la alerta roja.

Esta medida implica el desalojo y posterior cierre del parque para evitar que la posible caída de ramas o árboles ponga en riesgo a las personas que paseen por las zonas verdes. En los accesos al parque se colocarán carteles informativos.

Inspección de los técnicos

Los parques permanecerán cerrados hasta las 6:00 horas del martes para que los técnicos municipales puedan realizar una inspección de las incidencias que se hayan podido producir y valorar la situación.

La Policía Municipal está al frente del desalojo, en el que también participan agentes de Parques y personal de mantenimiento. El procedimiento en El Retiro consiste en cerrar las puertas de Mariano de Cavia y continuar, en sentido contrario a las agujas del reloj, hasta la puerta de la Independencia.

Se dejarán abiertas las vías de evacuación hasta el cierre definitivo, es decir, las puertas de Niño Jesús, Reina Mercedes, Independencia, Ángel Caído y Felipe IV.

En estos accesos se situarán agentes de parques para facilitar la salida de usuarios e impedir la entrada desde el exterior. A su vez, se realizarán barridos de las zonas, indicando a los usuarios las puertas a las que deben dirigirse e informando del cierre de las distintas instalaciones.