A dos días de que comiencen las Fiestas de San Isidro en Madrid. Los feriantes trabajan sin descanso y contra la lluvia para montar sus puestos en la Pradera.
Este año además, están muy enfadados porque aseguran que el Ayuntamiento no les ha permitido empezar a trabajar hasta hoy y con la tromba de agua caida esta tarde en la capital, van con mucho retraso.
La decisión del ayuntamiento de retrasar su apertura de los puestos caido como un jarro de agua fría.
También se quejan de que el consistorio sólo les permitirá abrir desde este jueves y durante los días que duren las fiestas.