Sos Racismo y la Coordinadora de Barrios han denunciado hoy ante los juzgados de Madrid represalias tras el motín de esta semana en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche y han pedido a la autoridad judicial la paralización de las expulsiones de los implicados. A la salida de los jugados, los portavoces de ambas organizaciones han explicado a los periodistas el contenido de la denuncia acompañados por un grupo de personas que gritaban "Ningún ser humano es ilegal".
El portavoz de la Coordinadora de Barrios, Javier Baeza, ha dicho que han solicitado "sobre todo el amparo judicial en la investigación de los hechos que acontecieron en la mañana del miércoles (19 de octubre) una vez que las 39 personas que se habían encaramado al tejado del CIE depusieron su actitud y fueron conducidos a sus celdas". "Lo que nos han referido, sobre todo en las visitas que ayer realizó Sos Racismo, son los tratos a los que fueron sometidos por parte de quien vigila el CIE, que es la Policía Nacional", ha añadido.
A su juicio, esto "revela no solo el ocultismo de lo que ocurre dentro del CIE sino también esa invisibilidad continua que se quiere sobre estos ciudadano". "A nuestro parecer y al de la Defensora del Pueblo, del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y de Naciones Unidas son lugares donde muy habitualmente se conculcan derechos fundamentales", ha apostillado.
Por su parte, la portavoz de Sos Racismo Madrid, Clara García, ha relatado que su organización realizó ayer visitas y recogió testimonios de personas que "manifestaban haber recibido malos tratos". "Lo que pedimos con esta denuncia es que se investiguen los hechos y que se paralicen las expulsiones de las personas implicadas para que no queden sin esclarecer y en impunidad como ha ocurrido en otras ocasiones", ha explicado.
García ha recordado que Sos Racismo exige el cierre de estos centros al estimar que "son espacios de no derecho y en los que se trata a las personas como si no fueran seres humanos". Ha abundado en que en la denuncia "se relatan testimonios de que estuvieron negociando con la Policía, llegaron a un acuerdo según el cual no iba a haber represalias y que cuando bajaron del tejado sí que hubo represalias".
En concreto, "malos tratos y restricción de las comunicaciones todo el día durante el cual no pudieron hablar ni con las ONG que realizamos visitas, ni con familiares ni con abogados, que tenían urgencia de contactar con ellos para llevar su proceso". "Según testimonios que tenemos pudo haber represalias también contra personas que no habían participado en las protestas", ha apuntado.
El representante de la Coordinadora de Barrios ha señalado que "el CIE de Aluche se ha distinguido por ser un lugar en el que la atención médica es tan deficitaria que se produjo hace unos años el fallecimiento" de un interno que "la propia Audiencia Provincial dijo que se podía haber evitado". En este sentido ha considerado que "la veracidad de lo que puedan decir los partes médicos del centro es más que sospechosa". "Además sorprende cómo parece ser que desde primera hora de la noche del martes estaban los servicios médicos dependientes del Ayuntamiento de Madrid, el Samur, y en ningún momento se les dejó acceder, lo que podría haber sido también una manera de contrastar si hubo incidencias médicas".
García ha denunciado que en las visitas han podido ver a personas que tenían "contusiones, hematomas y heridas", y ha insistido en que si ha habido tratos inhumanos "que se esclarezcan y juzguen".
