Treinta años del yacimiento madrileño en el que se halló el tigre dientes de sable
Cerro Batallones, en Torrejón de Velasco
Uno de los depósitos más importantes de Europa y único en España en restos del Terciario
REDACCIÓN / AGENCIAS
Si le preguntas a un paleontólogo qué cosas destacaría de Madrid seguro que una de ellas sería las excavaciones de Cerro Batallones, en Torrejón de Velasco.
Ya en 2001 se declaró Bien de Interés Cultural (BIC) y ahora celebra 30 años de su descubrimiento siendo uno de los depósitos paleontológicos más importantes de Europa y único en España en restos hallados de la Era Terciaria.
La consejera de Cultura, Marta Rivera de la Cruz, ha visitado este martes la excavación que ha permitido reconstruir el medio natural que existía en la zona hace más de 9 millones de años.
Las sucesivas campañas han permitido recuperar más de 10.000 restos óseos que, sobre todo, corresponden a animales carnívoros, presentando una amplia variedad de especies.
Las trampas mortales de Batallones
El hallazgo de uno de los principales depredadores, el tigre dientes de sable fue uno de los hitos del equipo que verano tras verano trata de rescatar este pasado natural.
También se han encontrado mastodontes y tortugas y jirafas gigantes, con ejemplares que se han conservado completos.
Estas acumulaciones tan amplias de restos fosilizados se deben a la existencia de cavidades naturales en el terreno, que actuaron como trampas mortales para la fauna.
Los animales entraban o caían en estos espacios buscando agua o comida y quedaron atrapados, favoreciendo la formación de estos enormes depósitos que, con el paso de millones de años, tal y como ha explicado la consejera, se han convertido en un "auténtico tesoro paleontológico".