Un coleccionista madrileño vende una diadema del siglo III a. C.

La Junta de Andalucía ha mostrado interés en adquirir la conocida como diadema íbera de Montizón, una pieza excepcional que un coleccionista privado de Madrid ha puesto a la venta después de un largo periplo sin conocerse su destino.

La directora general de Museos y Conjuntos Culturales, Aurora Villalobos, ha confirmado este martes en Úbeda (Jaén) el interés de la Junta por esta joya arqueológica con el fin de incorporarla a la colección del Museo Íbero de Jaén “porque cubre un aspecto muy interesante”.

No obstante, Villalobos ha indicado que la Junta de Andalucía quiere asegurarse primero de que los propietarios cuentan con los títulos de propiedad correctos para no fomentar prácticas ilícitas. Además, ha añadido que quieren tener seguridad plena de que la pieza es auténtica.

Aunque aún no han recibido la oferta económica, la directora general de la Junta ha señalado que cuando llegue se convocará a la Comisión Andaluza de Bienes Muebles, que es el órgano de asesoramiento de Andalucía.

Se trata de una diadema que data aproximadamente del siglo III antes de Cristo, realizada en oro y articulada en tres subunidades, con algo más de treinta centímetros de longitud.

El valor de esta pieza estriba en que se trata de una de las dos únicas diademas íberas conocidas hasta ahora. La otra, la de Jávea (Alicante), está expuesta en el Museo Arqueológico Nacional.

“Está realizada con la técnica de granulado y filigrana vinculada a la influencia de la orfebrería griega sobre un sustrato ibero con un fuerte pervivencia cultural fenicia u oriental y con una fecha de finales del s. IV o inicios del III a.n.e.”, ha destacado el catedrático de Arqueología Arturo Ruiz.

La localización de esta diadema ha permitido documentar el lugar de su origen (en el municipio jiennense de Montizón) y la historia de su deambular silencioso por el siglo XX y lo que llevamos del XXI.