Un hombre dispara una pistola de perdigones en una residencia de Aranjuez
EFE
Un usuario de la residencia pública Santiago Rusiñol, en Aranjuez, realizó varios disparos con una pistola de perdigones -que aún mantiene en su poder- y que llegaron a impactar en la ventana de otro matrimonio que vive en el centro.
El suceso requirió la intervención policial, pero el autor de los disparos sigue aún en la residencia y mantiene el arma en su poder, ya que la dirección del centro -de gestión directa de la Comunidad de Madrid- no ha podido intervenirla.
Denuncia ante la Comisaría
Así lo ha explicado la hija del matrimonio y han confirmado fuentes de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales. "Ellos estaban en la habitación tranquilamente cuando oyeron unos disparos. Entonces, mi padre se asomó, vio que había un impacto en la ventana y vio a la persona que estaba disparando, con una pistola, desde su habitación, que está justamente enfrente", ha explicado Teresa Pérez, la hija del matrimonio.
Pérez ha presentado denuncia por los hechos en la Comisaría de Policía de Aranjuez, donde, según ha detallado, le dijeron que ellos no pueden ni quitarle la pistola, ni entrar en la habitación, ni registrarlo a él, sin una orden judicial.
"La persona que disparó es muy problemática y muy agresiva", según Pérez, quien ha precisado que "cuando llegó a la residencia, comía en el comedor con todos los residentes, luego lo pusieron solo en una sala y, ahora, le llevan a la comida y la cena a la habitación".
Además, ha agregado, "a la persona con la que convivía la han tenido que trasladar a otra habitación y las trabajadoras no quieren entrar en la habitación para limpiar porque las recibe desnudo". Abren un expediente para valorar la expulsión del autor de los disparos, que está bajo vigilancia.
"Un residente de la residencia de mayores de Aranjuez esconde una pistola de perdigones", han reconocido fuentes de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales.
Agujero en el cristal
El pasado domingo realizó un disparo contra el cristal de su habitación y el lunes otro contra el cristal de una habitación contigua, donde estaban otros usuarios, provocando "un pequeño agujero en el cristal", según el Departamento que dirige Ana Dávila.
Desde la Consejería han precisado que este residente se ha negado en todo momento a entregar el arma a la dirección, cuyo reglamento contempla la prohibición de tener cualquier objeto que pueda causar daños a personas o instalaciones.
La directora del centro llamó a la Policía y presentó una denuncia por estos hechos. La Policía le ha tomado declaración esta mañana. El centro ha puesto "vigilancia reforzada" frente a la habitación del residente, en la que se encuentra solo.
De forma paralela, la dirección de la Agencia Madrileña de Atención Social, ha abierto expediente a este usuario, y se valorará su posible expulsión.
Fuentes policiales han confirmado que la directora de la residencia interpuso una denuncia por estos hechos y han pedido una orden de entrada al Juzgado para comprobar si el residente realmente tiene el arma y, en ese caso, incautarla.