Una marcha motorizada de más de un centenar de vehículos ha reclamado este domingo en Las Ventas el "sinsentido" de las prohibiciones de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 del Ayuntamiento y ha destacado que las restricciones "deben hacerse en base a las emisiones reales".
Según han denunciado los convocantes, estas medidas, que buscan aminorar la contaminación en la capital, se han hecho "por matrícula y no en función de las propias emisiones". Así, la plaza de toros de las Ventas se ha convertido en estacionamiento temporal de todo tipo de vehículos: camperizados, clásicos, utilitarios, motocicletas, entre otros.
La Asociación de Vehículos Afectados por Restricciones Medioambientales (Avarm), con el apoyo de otras instituciones como la Asociación de Familias Numerosas y clubes como los de Seat 600 y clásicos de Villa de Vallecas y Alcalá de Henares, se ha reunido en una marcha que ha partido tanto de Las Ventas como de Torrejón de Ardoz para bordear Madrid Central hasta Pozuelo. Todo para "solicitar algún tipo de diálogo con la administración" y pedir "sentido común".
En declaraciones a Europa Press, el presidente de Avarm, David Harvey, ha defendido que con esta concentración "se reivindica una zona de bajas emisiones con la que se pueda cumplir con la normativa europea, pero esta debe ser en base a "emisiones reales".
"Se ha hecho un corte por matrícula, no en función de emisiones", ha protestado, al tiempo que ha añadido que existen "otras medidas" que podrían imponerse en lugar de las propuestas, como puede ser la instalación en vehículos de filtros de partículas o catalizadores.
Para este domingo cuentan con adhesiones que van más allá del entorno del vehículo, "como la de La Asociación de Familias Numerosas de Madrid, la de la Federación de Asociaciones contra la Contaminación Acústica y en Defensa del Patrimonio Histórico".
Reclaman al de Madrid y a todos los ayuntamientos de la región el fin de "las medidas discriminatorias", así como "la anulación o devolución de todas las multas derivadas de la falta de información, nula o deficiente señalización, acumulación de expedientes o pésima gestión en la notificación y recepción de multas".
La primera marcha salió de la plaza de toros de las Ventas a las 10.30 horas, donde se concentraron los vehículos que todavía no son sancionados por circular en el interior de la M-30, excepto Madrid Central.
Por su parte, la presidenta del club 600 Alcalá de Henares, Yolanda Lizón, ha tachado de "desorbitado" que Madrid se cierre "por completo" para coches que "funcionan perfectamente", sobre todo cuando hay quien no puede permitirse otro coche. "En lo que a restricciones respecta, además, no existe consenso y cada ciudad y Ayuntamiento ha hecho lo que cree oportuno", ha añadido en declaraciones a Europa Press.
El presidente del club Seat 600 y clásicos Villa Vallecas, Pedro Montes, ha convocado 103 coches de su asociación. Al volante de su Seat 600, ya reconocido como "histórico", ha decidido protestar por unas restricciones "descabelladas".
Igual que él, José Antonio e Isabel han acudido con su Volkswagen Transporter, un vehículo también considerado histórico, aunque en su caso, no lo han acreditado como tal. "Como vehículo histórico puede circular. Pero para serlo, no solo tiene que superar los 30 años, que los supera, sino que además hay que pagar", han ironizado.
El matrimonio pertenece a tres asociaciones de vehículos clásicos y llevan 23 años coleccionando. "Somos una ínfima parte de lo que se contamina. Ahora se hacen las cosas perecederas y estamos reivindicando que se conserve porque al final esto es tradición, patrimonio", han argumentado.
"SE DEBE HACER UN ETIQUETADO JUSTO"
"Algunos coches antiguos contaminan menos que los nuevos. No puede ser que un trabajador tenga un coche que necesita y se prohíba su circulación por antigüedad y, en cambio, un señor con dinero se pueda comprar un coche nuevo que contamina el doble", ha criticado, incidiendo en las "fallas" del sistema de etiquetado, subrayando que conduce a la "desigualdad" y a la creación de un mundo de "ricos y pobres".
Así, ha explicado que "si se habla de contaminación, se ha de tener en cuenta los gramos de emisión". "Tengo un Seat Córdoba que contamina menos que mi Audi A4. Sin embargo, puedo circular por un mayor número de zonas con el más contaminante, por ser más nuevo", ha insistido.
Por su parte, Sergio ha acudido a esta manifestación motorizada porque posee un vehículo del año 98 y no está dispuesto a "achatarrarlo". Comprado en 2015 de segunda mano, recorre todos los días unos 50 kilómetros con él para trabajar.
"No puedo comprar uno nuevo y, de no tener este coche, tendría que hacer un trayecto diario de hora y media para trabajar, frente a los 25 minutos que tardaría con él", ha subrayado.
"Es absurdo. Se debe hacer un etiquetado justo que tenga en cuenta la vida útil del vehículo. Esto es una discriminación, este sistema de etiquetado hace clasista algo tan importante como la circulación", ha denunciado.