Vargas Llosa y el Teatro Real serán reconocidos con la Medalla de Oro de la Comunidad

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, propondrá en la próxima reunión de su Consejo de Gobierno la concesión de la Medalla de Oro del Dos de Mayo al premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa y al Teatro Real, en ambos casos por su contribución a la cultura.

Estas condecoraciones, junto con las otorgadas en la categoría de plata y el resto de las distinciones como la Gran Cruz, se entregarán durante los actos del Día de la Comunidad, el 2 de mayo, han informado fuentes del Gobierno regional.

Sobre Vargas Llosa, González quiere reconocer así la "valiosa contribución "a la cultura madrileña tanto del escritor como de la institución. El premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1986 y Nobel de Literatura en 2010, ya fue condecorado por el Gobierno madrileño al recibir la Medalla Internacional de las Artes en 2005.

El escritor peruano, de 79 años, es uno de los más importantes novelistas contemporáneos y ha afirmado en múltiples ocasiones que siente un vínculo especial por Madrid, donde pasa temporadas y donde nació su vocación literaria. Vargas Llosa se ha declarado también gran aficionado a los toros y es un habitual en la plaza de toros de Las Ventas.

La segunda de las medallas de Oro recaerá en el Teatro Real, fundado en 1850 y considerado uno de los teatros de ópera más importantes de España y de Europa. Consta de 65.000 metros cuadrados de superficie y tiene una capacidad para 1.746 personas. Es Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de monumentos histórico.

Asimismo, la Comunidad de Madrid anunció el pasado sábado que una Gran Cruz recaerá en el político Jaime Lissavetzky, quien fue secretario de Estado para el Deporte y es el portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Madrid en la actualidad.

Vargas Llosa y el Teatro Real suceden en la nómina de personas e instituciones reconocidas de manera singular con la Medalla de Oro por su contribución al servicio de los madrileños al Museo del Prado y al cardenal Antonio María Rouco Varela, premiados en 2014 por su convertir a Madrid en referente cultural y por su trabajo al frente del Arzobispado, respectivamente.