La Asamblea de Vecinos de Barrio de Universidad (Acibu), perteneciente a la zona de Malasaña, ha exigido que no se abran más bares en su barrio y ha pedido que no se conviertan sus calles en un parque temático de "beber", por lo que han iniciado la campaña '500 bares son muchos bares. Queremos un barrio habitable'.
El portavoz de la Asamblea, Jordi Gordon, ha explicado que en Malasaña toca a un bar por cada 70 habitantes. "Una situación que creemos que es insostenible porque produce suciedad, orines, botellón, rotura del mobiliario y todo tipo de perjuicios", ha señalado Gordon en rueda de prensa a los medios de comunicación.
En este sentido, el portavoz ha señalado que ahora con las terrazas que se vuelven a abrir, esto se va "a multiplicar". "Creemos que la gente que vivimos en este barrio también tenemos derechos como a dormir, ya que también pagamos impuestos, también invertimos a la comunidad. Lo que no se puede es intentar convertir una solución a la crisis en que la gente beba los fin de semanas a raudales", ha añadido.
Gordon ha manifestado que Malasaña es un barrio que tiene "el mejor barroco de Madrid" y "que tiene un patrimonio histórico y cultural", por lo que "no puede ser simplemente un parque temático de beber". "Ahora que llega el verano no se pueden abrir las ventanas porque el ruido es infernal", ha afirmado.
Por otro lado, ha destacado que muchos de los restaurantes, las tiendas de ropa de diseño e incluso los locales autodenominados 'café-librería', "se están transformando -de manera más o menos solapada- en bares de copas, que venden alcohol, ponen música y extienden sus horarios".
Por su parte, la presidenta de la Asamblea, Isabel Rodríguez, ha criticado la carencia de dotaciones en la zona, ya que "desde hace años se llevan reclamando bibliotecas, centros de salud, escuelas infantiles o polideportivos".
Según la Asamblea, "el barrio tiene un centro de salud para atender a casi 35.000 habitantes (el estándar de calidad dice que debería haber 1 por cada 25.000), un déficit de 700 plazas en educación infantil, una única biblioteca que lleva dos años cerrada por obras, no hay polideportivo ni piscina públicas y se dispone de un solo centro de mayores para atender a más de 5.000 personas mayores de 65 años".
"No vamos contra los bares. Sólo decimos que, con los más de 500 que ya hay, tenemos más que suficientes. Y que si no hay moratoria de licencias, el barrio, tal y como lo conocemos, puede desaparecer", ha señalado Acibu.
Por último, han pedido un compromiso "firme por parte de los partidos políticos antes de las elecciones, para congelar" el número de locales de hostelería mediante una moratoria, y garantizar, de esta manera, los derechos y el descanso de los vecinos".
"Vamos a solicitar una entrevista con todos los candidatos a la alcaldía de Madrid para lograr este compromiso", ha concluido Rodríguez.