Vecinos de Tirso de Molina denuncian inseguridad en la zona tras el asesinato de Concha

Los vecinos de Tirso de Molina se encuentran conmocionados tras el asesinato de Concha.

La comerciante, de 61 años, moría apuñalada este lunes en el interior de la tienda de ropa que regentaba en la plaza madrileña.

Concha era muy querida en el barrio, donde llevaba toda la vida. Numerosos vecinos continúan acercándose al lugar del crimen donde han depositado velas y ramos de flores en un altar improvisado.

Los vecinos y comerciantes denuncian la inseguridad que sufre el barrio desde, dicen, hace ya varios años.

A pesar de que se ha incrementado la presencia policial aseguran que "no se puede vivir tranquilos" en esta plaza.

PELEAS, AGRESIONES Y ROBOS

Los vecinos denuncian la presencia cada vez más numerosa de indigentes y drogadictos que viven y duermen en la plaza y que causan continuas peleas, agresiones y robos.

El pasado mes de mayo un hombre tenía que ser trasladado grave al Clínico tras una pelea que tuvo lugar en el mismo lugar y en marzo de este mismo año los propios vecinos solicitaron al Ayuntamiento la retirada de un aseo público ubicado en la plaza, que se había convertido en un foco de suciedad y de venta de drogas.

La propia Concha había manifestado su preocupación porque cada vez entraban más indigentes en la tienda amenazándola para atracarla.

El Grupo V de la Policía continúa las pesquisas para determinar cómo se produjeron los hechos y peinan la zona para intentar localizar el arma del crimen.

Testigos presenciales vieron salir corriendo a un hombre con la camisa ensangrentada, que todavía no ha podido ser identificado.

Inmaculada Sanz, vicealcaldesa de Madrid ha mostrado sus condolencias "a toda la familia y allegados" de la mujer asesinada En una entrevista en el programa 'Buenos Días, Madrid', ha manifestado que "todavía no se saben las circunstancias en que se produjeron los hechos" y que hay que esperar porque "la investigación está en curso".

"Madrid es una de las ciudades más seguras del mundo, esos hechos no deben tener cabida en nuestra ciudad, vamos a ser contundentes", ha dicho la vicealcaldesa, que reconoce que "es verdad que ha habido quejas vecinales en los últimos tiempos" y explica que por esta razón "se ha incrementado la presencia policial y el número de cámaras".