La Asociación de Perjudicados por el Bernabéu ha expresado su disconformidad con las medidas anunciadas por el Ayuntamiento para reducir el ruido generado por los conciertos, considera que hay una "emergencia sanitaria" y cree que, por normativa, debería ser suspendida esta actividad en el estadio.
Así lo ha manifestado el presidente de la asociación, Enrique Martínez de Azagra, después de conocer que este martes el Ayuntamiento y el Real Madrid han acordado que el final de los conciertos en el estadio Santiago Bernabéu estará limitado por contrato a las 23:00 horas.
A este respecto, el alcalde, José Luis Martínez Almeida, ha afirmado que mientras que el Real Madrid no adapte el estadio a la normativa "los conciertos concluirán a las once de la noche".
Consultado por EFE al respecto, Martínez de Azagra ha calificado esta medida como "una broma de malísimo gusto" al considerar que con los conciertos en el Bernabéu "se están incumpliendo todos los límites razonables del ruido" con unos niveles "asombrosos" de superación de decibelios, que calcula como "treinta mil veces más de lo permitido".
Según Martínez de Azagra "más que grave es una situación extremadamente grave, gravísima" teniendo en cuenta que la ordenanza municipal dice que es una situación de riesgo grave para la salud o seguridad de las personas cuando se superen los límites establecidos.
Los decibelios máximos se superan con creces, dice el presidente de la asociación de vecinos, y añade que para tal situación la ordenanza contempla que hay que ordenar "la suspensión de la actividad, de la instalación o del foco emisor".
"Lo que tienen que hacer es cerrar el estadio para este tipo de actividades que no están licenciadas, no tienen licencia, no está insonorizado y, por lo tanto, que se dejen de milongas", ha dicho Martínez de Azagra, quien responde con vehemencia: "¿Me va a quitar usted media hora teórica de perjuicio pero va a seguir haciendo que se vulnere la ley?".
Para el presidente de los vecinos, lo que debe hacer el Ayuntamiento es "hacer cumplir la ley y cerrar el estadio, y no mirar para otro lado".
También ha considerado "una broma" el hecho de que el Ayuntamiento anuncie que destinará plazas para los residentes, cuando -dice- "son todas las que han quitado con esa otra barbaridad que intentan hacer, que son los aparcamientos".
El presidente de los vecinos se refiere a dos aparcamientos previstos para 2.000 vehículos, uno bajo la entrada principal del estadio y otro bajo la calle Padre Damián, que la asociación considera "innecesarios".