El Gobierno regional ha asegurado que las declaraciones de Teresa Romero, que admitió no haber informado a su médico de familia del contacto con dos pacientes de ébola, demuestran que el exconsejero cesado, Javier Rodríguez, "estaba en lo cierto" pese a que "no estuviera muy afortunado en las formas".
Así lo ha dicho el portavoz del Ejecutivo regional y consejero de Presidencia y Justicia, Salvador Victoria, después de que ayer la auxiliar de enfermería que superó el ébola llegara a un acuerdo de conciliación con su médico de familia al reconocer que no la había informado de que había atendido a dos pacientes con esta enfermedad y que no rebasó el umbral de fiebre fijado en 38,77 grados.
Una declaración que, según ha dicho Victoria, "viene a confirmar la actuación correcta de los profesionales sanitarios y del sistema de salud", ya que "se actuó en todo momento de acuerdo con los protocolos entonces vigentes y de acuerdo con la información que había suministrado la propia paciente en ese momento".
Por lo tanto, ha continuado Victoria, las palabras de Romero ponen de manifiesto la "correcta" actuación de los profesionales sanitarios, que "han dado un ejemplo a nivel mundial de cómo tratar una situación que era inédita en Europa", y también la correcta actuación de la Consejería de Sanidad y del entones consejero, Javier Rodríguez.
"A la vista de estas declaraciones en las que (Romero) reconoció que no se ajustó a la verdad, sin perjuicio de que no estuviera muy afortunado en las formas, el consejero estaba en lo cierto", ha zanjado Victoria.