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El vicealcalde de Madrid Miguel Ángel Villanueva ha dimitido hoy de todos sus cargos para "serenar los ánimos" y rebajar la tensión que en el Ayuntamiento de la capital ha provocado la tragedia del Madrid Arena, en la que murieron cinco jóvenes y que ha alterado la gestión diaria del consistorio.

Poco después de presentar su dimisión a la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, Villanueva ha querido comparecer ante los periodistas para dejar claro que tiene la "conciencia tranquila", que nunca ha usado su cargo para beneficiarse él o a otros y que toma esta decisión en beneficio del gobierno local.

Tranquilo y sereno, Villanueva ha comenzado su intervención, que ha leído, pidiendo disculpas por el retraso en su comparecencia y ha considerado que éste era el momento de ser transparente y generoso con quienes han confiado en él.

El responsable municipal ha tomado la decisión una vez concluida la comisión de investigación sobre el Madrid Arena y aprobadas sus conclusiones, y con el objetivo de no entorpecer la actividad de un gobierno que "necesita trabajar por el interés de todos".

No lo ha hecho antes, ha explicado, porque su sentido de la responsabilidad le impide "abandonar el barco cuando hay una avería".

Su dimisión debe interpretarse "como lo que es", ha dicho Villanueva antes de reconocer que "igual" no tenía que haber ofrecido, horas después del suceso, los datos de las entradas vendidas por el promotor de la trágica fiesta, Diviertt, que, a su vez, había facilitado al Ayuntamiento el responsable de esa empresa, Miguel Ángel Flores.

"A toro pasado" y con perspectiva para evaluarse, Villanueva ha recordado que dio la rueda de prensa después del suceso porque era su "obligación" como vicealcalde y portavoz del gobierno local.

"Igual no tenía que haber dado esa cifra de aforo, pero es la que se dio a la Policía Judicial", ha reiterado el exvicealcalde, quien se ha definido como "extremadamente escrupuloso" en su "conducta ética".

Además, ha querido dejar claro que "nunca" se ha adjudicado "nada" a las empresas de Miguel Ángel Flores, pero eso "no ha sido suficiente para algunos", lo que respeta pero no comparte.

Ha reconocido que desde que ocurrió el suceso, la madrugada del 1 de noviembre, ha habido "presiones", pero las únicas víctimas son las cinco jóvenes que murieron, ha señalado antes de afirmar que no ha sido forzado por la alcaldesa para tomar la decisión de dimitir.

En cualquier caso, "el tiempo pone a cada uno en su sitio", ha subrayado el ex número dos del consistorio madrileño al ser preguntado sobre si se sentía víctima de una cacería personal.

Ha dejado claro que el juez que investiga el caso no le ha imputado por el momento, como tampoco al exconcejal de Seguridad Pedro Calvo, también dimitido y cuya imputación se anunció sin que se haya producido, ha explicado Villanueva.

En un momento en que Madrid afronta "retos extraordinarios", como la candidatura a los Juegos Olímpicos, Villanueva dimite pero seguirá siendo afiliado del PP, al que ha agradecido la confianza que ha depositado en él, así como a dirigentes como al exalcalde de la ciudad y ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y a Ana Botella.

No ha querido desvelar la conversación con la regidora, pero se ha mostrado convencido de que el "excelente" equipo que dirige la alcaldesa va a ser capaz de sacar adelante el proyecto de los Juegos Olímpicos y el resto de los objetivos de la ciudad.