El gasto en el centro de Madrid aumentó un 15 % durante la semana del Orgullo Mundial ('World Pride', del 23 de junio al 2 de julio), en cuyas actividades participaron 2,2 millones de personas, según el balance ofrecido hoy por el Gobierno municipal y su alcaldesa, Manuela Carmena. Manuela Carmena ha dado esta información en la rueda de prensa de balance de la festividad que ha convertido a Madrid en 2017 en referencia en la reivindicación de los derechos LGTBI.
La alcaldesa ha estado acompañada por el coordinador general de Alcaldía, Luis Cueto, y los delegados Inés Sabanés (Medio Ambiente y Movilidad), Javier Barbero (Salud, Seguridad y Emergencias), Carlos Sánchez Mato (Economía y Hacienda) y Celia Mayer (Políticas de Género y Diversidad).
La ocupación hotelera fue del 85 %, con una subida de precios del 15 %, según los datos facilitados al Ayuntamiento por la asociación de hoteleros de Madrid, y el 84 % de las personas atendidas en las oficinas de información del aeropuerto fueron extranjeros, según ha revelado hoy el coordinador general de la Alcaldía.
Un análisis encargado a BBVA por el Ayuntamiento indica que en la zona del World Pride -los barrios de Sol, Palacio, Justicia, Cortes, Universidad, Argüelles, Embajadores, Recoletos, Jerónimos y Castellana- el gasto total directo en esos días fue de 115 millones de euros -un 15 % más que en un periodo normal- y supuso el 30 % de lo gastado en total en la ciudad.
El World Pride 2017 ha supuesto un impacto publicitario de unos 66,7 millones de euros en prensa, radio, televisión e Internet, y 3,4 millones de impactos en audiencia, según un estudio elaborado para el Ayuntamiento por la empresa Kantar Media. Todos los dispositivos de seguridad, movilidad y emergencias cumplieron con efectividad su papel en el World Pride, a juicio del delegado Javier Barbero, para quien el evento transcurrió sin incidentes "gracias a la colaboración ciudadana y a la prevención". En la manifestación central participaron 1,5 millones de personas y el Samur realizó 405 asistencias, la mayoría de carácter leve.
Durante toda la semana trabajaron 2.999 agentes de la Policía Municipal (sólo un 2,2 % lo hicieron de manera obligada), de los que 883 participaron en el dispositivo en la marcha central.
Junto a ellos trabajaron el sábado 147 sanitarios del Samur (en el conjunto de la semana, 530), que mejoró los tiempos de respuesta con respecto a cualquier otro fin de semana.
La asociación Arcópoli ha cifrado en 32 los incidentes homófobos en la capital, ha explicado Javier Barbero. Por su parte, la delegada de Medio Ambiente, Inés Sabanés, el servicio de limpieza funcionó las 24 horas durante toda la semana de manera que los avisos por suciedad en el centro se redujeron en un 67 %, hasta los 468.
En total, se recogieron durante todo el periodo 488.240 kilos de residuos, 124.000 el día de la manifestación, el sábado 1 de julio. La red diurna de la EMT experimentó durante esos días una subida media de la demanda del 2,27 %, que ascendió al 3,8 % en el caso de las líneas reforzadas por el Ayuntamiento.
"Madrid tenía un reto. Cumplimos, lo hicimos", ha destacado hoy la alcaldesa, que ha puesto en valor que Madrid "quiere ser líder en todos los procesos de libertad, lucha contra la discriminación y las identidades alternativas de orientación sexual". "Madrid quiere ser la capital de la libertad y la aceptación", ha remarcado la alcaldesa, que ha puesto en valor que el símbolo del Orgullo LGTBI 2017, la bandera que lució en el Ayuntamiento, se hizo entre toda la ciudadanía.
Sin embargo, el portavoz del PP en el Ayuntamiento, José Luis Martínez-Almeida, ha criticado hoy el "triunfalismo" del equipo de Gobierno por este evento y ha dicho que se inflaron las expectativas sobre el número de asistentes. De la celebración del Orgullo Mundial en 2017 quedará para siempre en la plaza de Pedro Zerolo, en pleno barrio de Chueca, el lema "El Orgullo de Madrid", uno de los más difundidos durante la semana reivindicativa, que se instalará en letras de hierro.