El conductor del autobús que atropelló mortalmente a un hombre en Aravaca este fin de semana ha dicho en su primera declaración que giró hacia la izquierda con el autobús y que ignoraba que había atropellado con las ruedas traseras a la persona que acababa de golpear el cristal de su asiento.
El arrollamiento en el que se vio implicado un autobús que cubría la línea 656A (Moncloa-Pozuelo) se produjo sobre las 14.30 horas del día 6 la confluencia de las calles Ana Teresa y Pléyades.
Minutos antes se inició una discusión de tráfico en el transcurso de la cual un hombre comenzó a correr en paralelo al autobús y cuando llegó a la altura de la cabina del conductor, comenzó a golpear su ventanilla.
El autobús no paró
En ese momento, según apuntaron testigos presenciales, el chófer dio un volantazo a la izquierda y arrolló al hombre con las ruedas traseras. Los pasajeros comenzaron a gritar al presenciar la escena e instaron al conductor a parar el vehículo; pero éste hizo caso omiso y, tras una pequeña parada más adelante, continuó con su recorrido.
Tras los hechos, hasta el lugar se acercaron sanitarios del Samur-Protección Civil confirmaron el fallecimiento por la gravedad de unas lesiones que hicieron inviable cualquier intento de reanimación, según indicaron a Europa Press fuentes de Emergencias Madrid. Algunos familiares de la víctima tuvieron que ser atendidos por psicólogos del Samur.
Testimonio de los conductores
La empresa responsable de la línea indicó a los agentes que en el momento del incidente figuraban en sus registros dos autobuses en el mismo punto y a la misma hora. Ambos conductores testificaron ante los agentes que no habían tenido ningún problema.
Tras varias gestiones, entre ellas la inspección del autobús implicado en el arrollamiento, el conductor en cuestión fue arrestado el domingo por la noche por agentes del Grupo de Atención Ciudadana y puesto a disposición del Grupo V de Homicidios. Se trata de un Angel H., español de 56 años y vecino de Pozuelo de Alarcón.
Este mismo martes, la magistrada titular del Juzgado de Instrucción nº 39 de Madrid, ha acordado su libertad provisional. La juez le ha impuesto, no obstante, y como medidas cautelares, la obligación de acudir al juzgado cada quince días, la retirada del pasaporte y, por tanto, la prohibición de salir del país, así como la retirada del permiso de circulación de vehículos a motor.
Tras resolver la situación procesal del detenido, la magistrada se ha inhibido sobre el Juzgado de Instrucción nº 26 de Madrid, que es el que se encontraba de guardia de diligencias en el momento de los hechos y, por tanto el que abrió las diligencias previas iniciales y procedió a levantar el cadáver del fallecido.
No notó nada raro
El detenido ha manifestado a los agentes que no fue consciente del atropello de este hombre con las ruedas traseras de autobús y que no notó nada raro, ya que se trata de un vehículo de gran tonelaje. Pese a los testimonios en contra de varios pasajeros, él ha negado cualquier tipo de intencionalidad ni dolo en estos hechos.
Sin embargo, la Policía Nacional sigue atribuyéndole homicidio, además del de omisión del deber de socorro, cargos por los que a lo largo de este martes pasará a disposición judicial, según las mismas fuentes.
Los compañeros de Ángel se han mostrado sorprendidos por lo sucedido y han indicado que era un hombre normal y sin antecedentes de este tipo. "Es un tío muy cabal y tranquilo. Me imagino que no se enteró de lo que pasó, ya que seguro que hubiese parado", señalaron al diario 'El Mundo' alguno de sus amigos.
El chófer será investigado por la supuesta comisión de un delito de homicidio por imprudencia grave y omisión de deber de socorro, si bien esta calificación penal es inicial y podría variar según se vayan practicando las correspondientes diligencias de investigación en el marco de la instrucción.