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Agentes de la Policía Nacional han detenido a tres individuos como presuntos autores de trece atracos en diversos bares de la Comunidad de Madrid, donde entraban encapuchados e intimidaban a los empleados con una pistola detonadora y una eléctrica para rociarles después con gas pimienta. Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Madrid, la detención se produjo el pasado 28 de marzo, después de que durante uno de los atracos, una víctima arrebatara la gorra con la que se cubría el rostro uno de los autores, "facilitando su posterior identificación".

La investigación se inició a principios del presente año cuando los agentes tuvieron conocimiento de que se habían perpetrado varios robos con violencia e intimidación en establecimientos. En las denuncias formuladas por las víctimas, los agentes encontraron varios detalles coincidentes en todas ellas.

Los autores eran siempre dos hombres que accedían a los locales encapuchados y con sus manos cubiertas con guantes. Accedían a los bares durante el horario de cierre realizando un disparo al aire y tras intimidar a sus víctimas con un arma de fuego detonadora y un taser, las rociaban con gas pimienta para impedir su reconocimiento y que no opusieran resistencia.

Tras meses de investigación para identificar a los autores de los hechos, los agentes pudieron determinar que a pesar de que siempre actuaban de dos en dos, no siempre se trataba de los mismos sujetos. En uno de los robos, la víctima logró arrebatar a uno de los autores la gorra que le cubría la cabeza, momento en el que pudo observar la cara del atracador.

Una vez analizados todos los datos obtenidos y comprobadas las matrículas de la vehículos utilizados en los robos, los investigadores pudieron identificar a los autores de los hechos, que fueron detenidos. Tras el arresto se registraron los domicilios de los implicados donde se encontró la pistola eléctrica -con forma de linterna para hacerla pasar desapercibida- y 18 cartuchos detonadores.

Los detenidos como presuntos autores de 13 delitos de robo con violencia e intimidación fueron puestos a disposición de la autoridad judicial que decretó su ingreso en prisión.