Dos jóvenes han confirmado ante el juez que sufrieron abusos por parte de un profesor del colegio Valdeluz Agustinos de Madrid y otra chica ha declarado que no se considera víctima y que tenía una relación "cercana y cordial" con el docente.
Tres jóvenes han prestado declaración durante aproximadamente una hora ante el titular del Juzgado de Instrucción número 13 de Madrid, Hermenegildo Barrera, que investiga el caso sobre los abusos a menores supuestamente cometidos por un profesor del centro.
Las tres han estado "enteras" y las declaraciones se han desarrollado con "normalidad", según Ramón Muñoz Cid, el abogado del docente.
Dos de ellas han ratificado ante el magistrado que sufrieron abusos por parte del profesor y otra joven ha asegurado que no ha comparecido como "denunciante", sino para "declarar" porque la Policía la llamó, después de que acudieran unas amigas suyas, pero no se siente víctima de abusos porque tenía una relación "normal, muy cordial y muy cercana" con el docente.
Una de ellas denunció los hechos voluntariamente ante la Policía cuando lo hicieron sus amigas y las otras dos fueron llamadas para prestar declaración en sede policial, ha señalado Jesús Mandri, el abogado del exdirector y del exjefe de estudios del colegio.
Ninguna de las tres testigos de hoy comunicó los hechos a ningún adulto, ni de su familia, ni del centro escolar, ha destacado Mandri.
Hasta el momento, han declarado en sede judicial cinco niñas con edades comprendidas entre 19 y 21 años y quedan por hacerlo alrededor de diez.
EL ABOGADO DEL PROFESOR DICE QUE SU REPRESENTADO ES COMPLETAMENTE INOCENTE
El representante legal del profesor ha apuntado que, en el testimonio de alguna de las víctimas, hay "contradicciones" como el hecho de que haber tomado la decisión de denunciar al docente, pero haber seguido yendo a clases con esa persona, una situación, en su opinión, "inexplicable" e "incomprensible".
Muñoz Cid ha indicado que había mensajes de WhatsApp entre el profesor y las estudiantes de felicitaciones navideñas que ponen en evidencia que era "cercano a los alumnos" y que "se preocupaba por ellos".
El profesor Andrés Díez fue detenido el pasado 11 de febrero acusado por la Policía de ocho delitos de abusos sexuales, uno de violación y otro de exhibicionismo supuestamente cometidos desde 2006 contra alumnas de entre 12 y 17 años de ese centro y de la academia de música Melodía Siglo XXI, aneja al colegio.
El juez decretó su ingreso en prisión provisional por siete delitos de abusos sexuales, eliminando las acusaciones por violación y exhibicionismo, pero en los días siguientes la Policía ha confirmado que hay quince víctimas.
El docente ingresó el 14 de febrero en la prisión de Soto del Real (Madrid), en la que se le ha aplicado el protocolo de prevención de suicidios.
El profesor tiene "la conciencia tranquila" porque "él no ha hecho nada y es completamente inocente", según su letrado, quien ha agregado que, en la cárcel, se le ha aplicado el protocolo antisuicidios -que consiste en que hay un preso de confianza a su lado las veinticuatro horas del día- por tratarse de un caso mediático y por su perfil.
