Un paseo desde el comienzo de la carrera de San Jerónimo hasta la Plaza de Neptuno sirve para hacerse una imagen de lo que está ocurriendo con los hoteles de lujo en Madrid. Apenas 350 metros en los que los engalanados porteros del hotel Urban, Villareal, Palace o NH Paseo del Prado han desaparecido y sus puertas están cerradas a cal y canto.
Una pareja de septuagenarias, vecinas del barrio, se paran frente a la imponente fachada del Palace mientras se lamentan y sorprenden a partes iguales al ver las doradas puertas de la entrada principal cerradas. “No recuerdo haber visto jamás estas puertas cerradas. Qué tristeza” susurra una de ellas, mientras la otra le echa la culpa al “maldito bicho”. Y así es, la crisis del coronavirus ha hecho imposible que los hoteles de lujo de Madrid puedan abrir sus puertas, pese al fin del estado de alarma del pasado 21 de junio. Y un cartel a la entrada del Westin Palace lo deja claro: "Cerrado por la situación del mercado".
Únicamente 4 de los 34 hoteles de cinco estrellas de la capital que forman parte de la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid (AEHM) han abierto tras la crisis y, por el momento, excepto el Hotel Westin Palace que espera poder ir recuperando la normalidad a final de mes, el resto no tienen fecha conocida de apertura en el horizonte. Por ahora, Barceló Torre de Madrid, Hospes Puerta de Alcalá, NH Suecia y Urso son los únicos que consiguen resistir y mantenerse abiertos, como si de una aldea gala se tratase.
“Está claro que la crisis ha tenido un impacto en estos hoteles y en todos en general. Muestra de ello es el retraso que ha supuesto en la apertura del Four Seasons y la próxima reapertura del Mandarin Oriental Ritz” ha señalado Mar de Miguel, Secretaria General de la AEHM, a Telemadrid.es.
Los hoteles de lujo tienen una “gran relevancia no solo para el posicionamiento de Madrid como gran destino, sino porque trae consigo a un nuevo perfil de viajero con un alto poder adquisitivo para la ciudad”.
El turismo ha caído en picado en Madrid y los hoteles se encuentran con una ocupación que no llega al 20% durante el mes de agosto, frente al casi 65% en el que se encontraban el año pasado, según los datos proporcionados por AEHM.
Sin duda, desde el sector hotelero madrileño la palabra que más se repite es incertidumbre; por cuando se podrá abrir, por la repercusión que estos meses de cierre va a tener y, lógicamente, por cómo evolucionen la pandemia y el turismo en los próximos meses.
Mientras, los pocos turistas que se ven por la ciudad se acercan a estos hoteles convencidos de que podrán echar un vistazo y disfrutar de sus terrazas o salones. Un grupo de amigos mexicanos se dirigen guía de viaje en mano con paso firme al hotel Urban, seguramente han oído hablar de los cócteles y la terraza, tan de moda siempre en esta época del año. Sin embargo, entre la sorpresa y la decepción se dan media vuelta tras pegar la nariz en el cristal y darse cuenta de que en este momento es un hotel sin huéspedes.
Desde la AEHM tienen muy claro que "tenemos que coordinar los esfuerzos desde los sectores público y privado para recuperar la confianza de los viajeros. Los hoteles de Madrid han hecho las cosas bien para proteger la salud de los profesionales, los visitantes y de todos los ciudadanos y debemos esforzarnos en comunicarlo, para que los viajeros nos visiten sabiendo que Madrid es un destino seguro."