A punto de cumplirse un año del incendio en el cementerio ilegal de ruedas más grande de Europa, en Seseña (Toledo), el municipio "rebosa vida". Hay más comercios, más casas ocupadas y listas de espera para alquilar una vivienda, y, al echar la vista atrás, su población habla de "un mal recuerdo".
No hay rastro del suceso en la parcela donde se depositaba la montaña de neumáticos que empezó a arder en la madrugada del 13 de mayo de 2016, situada entre Seseña y Valdemoro (Madrid), ni en la urbanización El Quiñón, a 500 metros de donde se iniciaron las llamas y donde hace menos de dos meses el Gobierno de Castilla-La Mancha dejó de realizar mediciones de la calidad del aire.
Lo único que queda por saber es quién lo hizo y por qué lo hizo (todo apunta a que fue intencionado), unas investigaciones que se encuentran bajo secreto de sumario y de las que se encarga la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Valdemoro.
"El recuerdo fundamental de hace un año es el de un pueblo unido que demostró estar a la altura de las circunstancias, un pueblo joven, pero responsable", rememora el alcalde de Seseña, Carlos Velázquez, en una entrevista con la Agencia Efe.
En El Quiñón, la urbanización próxima a Madrid construida por Francisco Hernando, el Pocero, que se hizo famosa por ser símbolo de la especulación y la burbuja inmobiliaria, viven actualmente unas 10.000 personas, una gran mayoría sin empadronarse en el pueblo.
Pero al contrario de lo que podía esperarse tras el incendio en el megavertedero, que generó alerta en la población por las posibles consecuencias para la salud, el barrio "rebosa vida, se ve en los parques por la tarde y los fines de semana", dice el alcalde.
Este resurgir del pueblo lo confirma a Efe Virginia Domínguez, vecina de El Quiñón y miembro de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos del colegio del barrio, quien asegura que se están vendiendo nuevas promociones de viviendas y "hay lista de espera para el alquiler".
Nuevas familias para las que también se está construyendo un nuevo colegio, concertado, cuyas obras comenzaron el pasado mes de febrero y que está previsto que abra sus puertas en septiembre de 2017.
"Yo estoy supertranquila por la calidad del aire. Se han llevado las ruedas, y la vida sigue", afirma esta vecina, que recuerda, "como si fuera ayer", que ella y su familia tuvieron que "salir corriendo" como consecuencia del incendio, que generó llamas de varios metros de altura y una gran nube de humo visible desde varios kilómetros.
El fuego no se dio por extinguido hasta 24 días después y conllevó la suspensión de las clases escolares durante varios días, así como el desalojo durante un día de la urbanización.
"Nadie entendía cómo una parcela rústica en diez años se convirtió en el mayor vertedero ilegal de neumáticos de toda Europa", lamenta Velázquez, quien para dar por "zanjado" lo ocurrido quiere convocar por última vez la Comisión Social de Coordinación creada tras el suceso, pero reclama a la Junta "datos sobre el aire".
Según un informe facilitado a Efe por la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, durante el incendio y posteriormente en la limpieza de la parcela, "no se han superado los límites ambientales de calidad del aire que marca la normativa vigente".
El documento recoge, además, que "el terreno ha quedado libre de residuos, ya que de su estudio se deduce que no se alcanzan los niveles para tener que declararlo como suelo contaminado".
En total, se han retirado 9.712 toneladas de neumáticos, 20.194 toneladas de cenizas y 1.290 de fracción metálica, unos trabajos que finalizaron el pasado febrero y que han tenido un coste de 4,78 millones de euros.
"El asunto del incendio ha quedado en un mal recuerdo, la vida en el barrio discurre con total normalidad, pero obviamente hay una cuestión en los juzgados de Valdemoro. No hemos sabido nada de quién fue la persona o las personas que provocaron el incendio, pero yo confío en la acción de la justicia", dice el alcalde de la localidad.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) han indicado a Efe que la Policía Judicial trata aún de esclarecer quiénes son los ocupantes del vehículo captado por unas cámaras de seguridad muy cerca de la parcela, lo que dirigirá las investigaciones posteriores. Además, en las Cortes de Castilla-La Mancha se ha creado una comisión no permanente de investigación en torno al vertedero de neumáticos.