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(Actualizado

Un Jurado Popular de la Audiencia Provincial de Madrid juzgará a partir del próximo 4 de abril a tres acusados del asesinato de Carlos Jarry S.L., un joven de 23 años que fue tiroteado en Arganda del Rey el 12 de enero de 2008.

Se sentarán en el banquillo de los acusados Rafael R.D., Ignacio R.G. y David O.M por delitos de asesinato y tenencia ilícita de armas. La Fiscalía de Madrid pide penas de 18 y 20 años de cárcel.

Carlos Jarry tenía más de 30 detenciones anteriores, la mayoría por robo con fuerza, por lo que las primeras investigaciones apuntaron a un ajuste de cuentas.

Los hechos se produjeron sobre las 22.05 horas, cuando los procesados interceptaron a la víctima cuando salía de su garaje en un vehículo. Así, Ignacio R. sacó un arma y le disparó siete veces, dándose a la fuga los procesados.

Tras encontrar el cuerpo, los agentes averiguaron que el vehículo en el cual habrían huido los presuntos autores materiales de los hechos era un vehículo Mercedes clase A, cuya serie de matrícula correspondería a las letras DPT.

Este hecho fue notificado de forma inmediata a la Central Operativa, que radió los datos a través de la emisora. Casi de forma simultánea, una Patrulla de Seguridad Ciudadana del Puesto de la Guardia Civil de Rivas Vaciamadrid solicitó autorización para ralentizar la circulación de la A-3, sentido Madrid, con la finalidad de evitar la huída más probable del vehículo.

Sobre las 22.18 horas, los agentes de esta patrulla, ubicaron el coche, solicitando a la Central que contactara con el Cuerpo Nacional de Policía, al entrar el automóvil en su demarcación e ir la Patrulla de la Guardia Civil en su persecución.

A las 22.29 horas, el automóvil era interceptado en el punto kilométrico 9.500 de la M-30, por agentes e Centauros del Cuerpo Nacional de Policía y la Patrulla de la Guardia Civil de Rivas Vaciamadrid, procediéndose a la detención de los tres ocupantes, que fueron trasladados primeramente a dependencias de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Moratalaz, y posteriormente al puesto de la Guardia Civil de Arganda del Rey.

En las inmediaciones del lugar del suceso, era localizado un vehículo robado marca Audi S4, cuyas llaves estaban en poder de Carlos Jarry.

Fruto de las investigaciones, se logró localizar el arma utilizada en el homicidio, una pistola Glock 26 del calibre 9mm/pb, que los autores materiales del hecho habían abandonado en una zona próxima a Valdemingómez, mientras huían.