Un maratón de baile agita La Casa Encendida

El patio de La Casa Encendida de Madrid se ha convertido hoy en una pista de baile por la que han pasado decenas de personas que participan en el maratón de baile "Danzad, danzad malditos", que organiza el colectivo Gloria & Robert y que pretende reflexionar sobre "lo que puede hacer un cuerpo".

Desde las doce de la mañana y hasta las diez de la noche, el patio del conocido centro cultural madrileño mantendrá el ritmo con canciones de los años cuarenta, los setenta o los ochenta, pasando incluso "por el techno más duro" tal y como lo describe Miguel Ángel Martínez, uno de los organizadores del evento.

Mientras suena "Heroes", el éxito de David Bowie, Martínez, explica a Efe que últimamente "nuestros cuerpos están cansados porque no paramos de trabajar y de producir" y, por ello, desde el colectivo proponen un maratón de baile para que los participantes descubran "todo lo que pueden hacer con su cuerpo".

Al fondo, cerca de diez personas bailan en la pista central. Una de ellas es Manuel, quien se ha acercado después de que unos amigos se lo recomendaran y quien reconoce que "puede ser muy duro bailar sin alcohol y sin el apoyo de la noche, pero -dice- llega un momento en el que la dinámica te envuelve".

Alrededor de la pista, repartidos por el patio, varias pantallas proyectan estadísticas a partir de unos formularios que los participantes rellenan antes de subir y del que se extrae la conclusión de que el 80% de los encuestados baila más tiempo sobrio que bajo los efectos del alcohol.

Para Martínez "los formularios son una parte más de esta propuesta" que está inspirada en el clásico cinematográfico "Danzad, danzad malditos" de Sidney Pollack, donde se narra la historia de un maratón de baile en los Estados Unidos posteriores al crack del 29.

Marta y Lidia venían del rastro y se han unido a esta fiesta de la danza "para calmar el estrés" y Pía, que se enteró del evento por las redes sociales, cree que esta iniciativa es "muy interesante" porque trata del agotamiento, "de cuánto podemos aguantar".

Los interesados en participar "solo tienen que ponerse un dorsal y subirse al escenario", ha explicado Martínez. "Es una propuesta para cualquiera que ponga el cuerpo y se suba a bailar con nosotros", concluye.