El paso de Filomena por nuestra región ha causado importantes destrozos en muchas protectoras en las que la nieve ha dejado incomunicados a los animales, que aguardan una familia. Si ya la pandemia ha puesto a las protectoras contra las cuerdas porque los ingresos con los que mantienen las instalaciones de los albergues y a los animales se han visto mermados de manera importante, ahora Filomena les complica mucho más la situación.
Los voluntarios de las protectoras de la Comunidad están desafiando a la nieve y al frío y haciendo lo imposible por llegar a los albergues, a las colonias de gatos, etc. para que no los falte a los animales alimento y un techo seguro.
Las imágenes de estos días son un SOS de las protectoras que temen por los animales si no encuentran soluciones: maquinaria para poder reconstruir los albergues, donaciones económicas y casas de acogida para poder poner a salvo a los animales hasta que la situación mejore.
Los animales que se encuentran en las protectoras, en su mayoría perros y gatos, suelen ser animales que llevan mucho tiempo esperando una oportunidad o cachorros de camadas que han abandonado, en ambos casos el frío extremo de estos días es para ellos muy peligroso.
Desde la Protectora La Madrileña nos relatan la odisea que estos días están viviendo los voluntarios para poder llegar a asistir a los animales. "El sábado pudieron ir dos o tres caminando ya que viven relativamente cerca aunque fue tedioso llegar y tardaron muchísimo por la cantidad de nieve. El domingo pudimos ir otros poquitos hasta metro y luego andando unos kilómetros", nos cuentan desde esta protectora a la que la nieve ha dejado inaccesible el acceso por coche. "Por suerte tenemos un guardes que puede atender lo básico como la alimentación y asegurarse que no hay incidencias o urgencias", nos cuentan.
Una imagen que se repitió en prácticamente todos los albergues y protectoras de animales, en los que los voluntarios a los que les fue posible se acercaron a las instalaciones para seguir cuidando a los animales.
La Madrileña es el hogar de 50 perros y 20 gatos, en este momento, pero el número de perros suele ser mayor. Lo mismo le ocurre a la protectora El Campito-Salvando Peudos, quienes buscan soluciones para poder seguir haciendo frente a las necesidades de los 32 perros y más de 80 gatos a los que cuidan en sus instalaciones.
El paso de Filomena ha sido tan devastador que todavía no les ha dado tiempo ni a cuantificar los daños porque "estamos centrados en que los animales sobrevivan al temporal, pero tenemos techos caídos como el de entrada al completo, algunos cheniles dañados, techos de cuarentenas que casi se caen por el peso de la nieve, tuberías rotas y congeladas y peligran varias estructuras" relatan preocupados desde esta protectora madrileña.
Es mucha la ayuda que necesitan: palas, sal, comida húmeda (latas) para alimentar con mayor calorías, mantas, material para reconstruir las zonas dañadas.... porque "poner los animales a salvo , que no les falte el agua y reconstruir las instalaciones" son las grandes preocupaciones de todos estos voluntarios que son los 'ángeles de la guarda' de cientos de animales.
Foto: Protectora AXLA Madrid |Vídeo: Telemadrid
Desde la protectora El Campito han hecho una estimación aproximada de los destrozos y es de unos 10.000 una cantidad económica muy elevada. "Ahora mismo necesitamos ayuda económica para poder reparar las instalaciones que hemos perdido" nos cuentan desde la protectora.
Además, les preocupa especialmente las instalaciones en dónde viven 14 gatos callejeros, que por motivos de salud no pueden volver a soltarse. "Son muchos y hasta que reparemos su instalación están encerrados en un cuarto dónde no lo están pasando bien".
Formas de ayudar
Las protectoras se están movilizando por las redes sociales para conseguir ayuda. Bien sea como aportación económica, prestando maquinaria para poder ir abriendo los accesos a los albergues, la mayoría situados en zonas retiradas y de difícil acceso, pero también piden a los madrileños que se conviertan en casas de acogida y así poder mantener a los animales a salvo de manera temporal.
Lo miso ocurre con los pájaros de la ciudad, que por la nieve y el frío de estos días les está resultando muy complicado poder encontrar alimento. Desde diferentes organizaciones han ido dando recomendaciones para poder ir dejando alimento a las aves, hasta que las condiciones meteorológicas mejores.