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Y hemos hecho la senda del Jenaro, entre El Berrueco y Patones en burro .Es un camino de herradura de siglos.

Una forma de proteger a los burros de la Sierra Norte que estan en peligro de desaparecer.

En El Berrueco, junto al embalse de El Atazar, arranca la senda de Genaro. Este viejo camino de herradura era antaño la principal vía de comunicación entre los pueblos de la sierra norte. Jaime, Antonio y Javier rememoran hoy el la ruta que durante siglos trazó el burro.

Teófila, Teófilo y Paloma son sus compañeros de viaje. A veces sobre sus lomos, otras concediéndoles descanso en el sinuoso y escarpado camino que nos conduce a Los Pradales, una aldea abandonada cuyos últimos vecinos debieron emigrar a Patones a finales del siglo XVIII

El agua que baja de la montaña nos acompaña durante la última parte del itineario. En la turística Patones de Arriba, con sus casas de piedra y angostas callejuelas, la llegada de los burros suscita la curiosidad de los vistiantes. La escena parece anacrónica, pero seguimos en el siglo XXI. Y tenemos tiempo para el reposo.