La tienda de los horrores en Carabanchel
Alimentos caducados, carnes y pescados colgados sin envoltorio ni etiquetado, golosinas a granel sin bolsas ni guantes...
El local, en la calle Ramón Saiz, será inspeccionado por si tiene algún daño estructural tras las obras realizadas en su interior
Agentes de la Policía Municipal de Madrid han detectado en el distrito de Carabanchel un local dedicado a la venta de alimentación y bazar con graves deficiencias en materia de seguridad e higiénico-sanitarias.
Los agentes realizaron una inspección a un local situado en la calle Ramón Saiz, el cual realizaba la actividad de bazar y alimentación. Al entrar en dicho establecimiento encontraron a la responsable y titular de la actividad tras un mostrador con un cigarrillo encendido y fumando, hecho por el que fue denunciada.
Durante la inspección se detectaron graves deficiencias en materia higiénico-sanitarias, como la disposición de trozos de carne y pescado colgados en un almacén sin envoltorio ni etiquetado, desconociendo tanto el origen como la trazabilidad de dichos alimentos, que fueron intervenidos e inmovilizados en el lugar y puestos a disposición de las autoridades sanitarias. Además, disponía de una zona de venta a granel de golosinas, sin tener a disposición del público bolsas o guantes para su adquisición.
También se observaron alimentos expuestos para la venta caducados, que fueron retirados en ese momento, más concretamente tres unidades de sándwiches con fecha de caducidad 9/12/2021, fideos de batalla con fecha de consumo preferente antes del 05 de enero de 2021 y repollo salado con fecha de caducidad del 30 de abril de 2020.
Igualmente se observó que la disposición de las zonas complementarias del local habían sido modificadas y las salidas de emergencia se encontraban cerradas o tenían elementos que impedían su uso normal. Además, encontraron cajas almacenadas en los accesos a estas salidas. Existían unas escaleras de acceso al sótano en el que se observó una zona de almacenaje donde también se habían producido obras, modificando las bajadas de agua para dejar un espacio lo más diáfano posible, apreciándose bovedillas huecas y puntales junto a las columnas.
Durante esta inspección se encontró un armario, junto al mostrador de la entrada, donde se almacenaban un total de 1.658 productos pirotécnicos de categoría F1 y F2, los cuales fueron intervenidos y depositados en las dependencias de la unidad de distrito de Policía Municipal.
Además de los informes correspondientes se ha solicitado la evaluación urgente de los técnicos municipales para comprobar la estructura del local, debido a las obras realizadas.
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