La vida de Belén cambió radicalmente gracias a una cirugía plástica pionera que realiza el Hospital Ramón y Cajal. Con una intervención ambulatoria de una hora consigue aliviar el dolor y reducir el riesgo de úlceras, infecciones y amputaciones en pacientes con pie diabético.
Belén ya puede andar sin muletas. Hace cuatro años, tras perder un dedo por una infección en una uña, el doctor Pablo Benito le diagnosticó neuropatia periferica causada por la diabetes, que cursa con insensibilidad, dolor, infecciones, ulceras y puede llevar a la amputación.
Este le aplicó una técnica pionera en España y en Europa llamada descompresión quirúrgica. Esta es una operación ambulatoria, con anestesia regional y que dura una hora.
Belén ya no tiene dolores. El doctor Pablo Benito insiste en que el diagnostico precoz es clave y de hecho, muchos diabéticos desconocen que lo son.