(Actualizado

No es fácil acostumbrarse a la progresiva implantación de vías para ciclistas, en las calles de Madrid.

Un ejemplo lo podemos ver en el distrito de Vicálvaro donde van a convivir tres tipos de espacios para los que van en bicicleta, que lindan con los reservados para conductores y peatones.

Algunos han estrenado los carriles, marcados por una señal en la que las bicis coinciden con los coches, que no podrán circular a más de 30 km/h.

En otras avenidas con mayor intensidad de tráfico habrá carriles bicis.

Para otros puntos estudian carriles bici en contra sentido, bicicletas que circulan en sentido contrario, como ya ocurre en la calle Mayor.