La prima de riesgo de la deuda soberana española inició hoy la sesión en el mercado secundario con una subida de tres puntos básicos y se situó en 225, después de que el Gobierno decretara el estado de alarma por el plante de los controladores aéreos, que obligó a militarizar el servicio.
Esta nueva bofetada para la imagen de España en los mercados internacionales se produjo después de que el viernes los controladores aéreos españoles abandonaron sus puestos de forma masiva en protesta por un decreto aprobado por el Gobierno que clarificaba sus jornadas laborales y con el que no estaban de acuerdo.
La consecuencia inmediata fue el cierre del espacio aéreo español en el primer día del "Puente de la Constitución", el más largo y esperado del año, con lo que cientos de miles de viajeros se quedaron tirados en los aeropuertos de toda España y el Gobierno declaró el estado de alarma y militarizó el control aéreo.
De esta forma, y después de los ajustes que siempre se producen al cierre de los mercados, el interés que tiene que pagar el bono español a diez años a los inversores se situó en el 5,097%, por encima del 5,082% del viernes, mientras el precio, que se mueve a la inversa del rendimiento, caía al 98,085%, desde el 98,200% precedente.
La rentabilidad del bono alemán a diez años, considerado el más seguro de Europa, bajaba en la apertura hasta el 2,847%, desde el 2,859% de la última sesión, en tanto que el precio se encarecía hasta el 96,990%, desde el 96,890% previo.
También se ampliaba la diferencia entre el bono griego y el alemán en seis puntos básicos e iniciaba el día con 875, igual que ocurría con el bono irlandés, que ensanchaba su diferencial con el germano en ocho puntos básicos y lo situaba en los 536.
Los seguros de impagos de deuda (CDS) de España se situaban en los primeros minutos de la sesión en 296.670 dólares anuales para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares en bonos españoles a 10 años.
En cuanto a los futuros, los contratos que se negocian sobre la deuda alemana subían hasta el 126,37%, frente al 126,19% del viernes, mientras los que pronostican el comportamiento de la deuda estadounidense parten hoy desde el 123,01%.