Los políticos han madrugado hoy para ejercer su derecho al voto a pesar de la resaca de la final de la Liga de Campeones, y el primero de todos ha sido el cabeza de lista del PP, Miguel Arias Cañete, que a las nueve de la mañana ha depositado la segunda papeleta que entró en la urna de su colegio electoral.
Arias Cañete votó inmediatamente después del presidente de su mesa y tras esperar varios minutos a que abrieran el colegio, muy cerca de su casa de Jerez de la Frontera, con la única compañía de periodistas, cámaras y compañeros de partido que también madrugaron para escoltar al candidato.
También mañanero fue el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ejercía el derecho al voto a las 9:30 horas, poco después de abrir su colegio, y recordando a los periodistas que esta noche esperaba "otro partido muy bonito", en el que "tienen la palabra todos los ciudadanos".
El fútbol ha sido el referente de numerosos políticos y aunque el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, presente ayer en Lisboa en la final de la Liga de Campeones, no quiso pronunciarse sobre el resultado sí reconoció, finalmente, ante los periodistas "la enorme emoción" aunque "la vida continua y el fútbol también".
Pero precisamente la celebración del partido en víspera electoral y un pronóstico lluvioso para la mitad norte hacían temer que la abstención ante unos comicios europeos fuera aún mayor de lo habitual, por lo que los políticos se han esforzado en aprovechar su paso por las urnas para exhortar a los ciudadanos a votar.
"Hoy se juega la final de verdad", ha dicho la portavoz de UPyD, Rosa Díez, que ha querido transmitir a los españoles que es el momento de "salir al campo".
Y con la particularidad del fin de fiesta de anoche, esta primera parte de la jornada ha discurrido con la normalidad de otras ocasiones salpicada sólo por incidentes poco relevantes como silicona en las puertas de algún colegio, retrasos en la apertura de otros y falta de urnas o papeletas.
También la papeleta le ha faltado al coordinador federal de IU, Cayo Lara, quien al llegar a la mesa electoral se percató de que no llevaba el sobre, por lo que tuvo que volver sobre sus pasos y hacerse con uno de nuevo.
Un caso anecdótico se ha dado en Villar del Ciervo, un municipio de menos de trescientos habitantes de la provincia de Salamanca, donde un presidente de mesa se ha declarado 'antisistema', se ha negado a constituirla y ha tratado de impedir que se celebren las elecciones.
Sin embargo, la nota más triste ha tenido lugar en Zaragoza, donde el diputado regional del PP por Aragón Joaquín Salvo falleció repentinamente cuando salía de su casa para ejercer su voto.
Y a media jornada para que cierren los colegios, se ha dado la circunstancia de que uno de ellos, en el municipio riojano do la Villaroya, ha permanecido sólo dos minutos abierto.
A las 9:02 dio por concluida la votación tras ejercer el derecho las nueve personas que componen el censo. Es decir, que este colegio cerró con una participación del ciento por ciento, algo que, con toda probabilidad, no se dará en el resto del país.