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Pablo Casado se ha presentado esta mañana ante los compromisarios que elegirán al sucesor de Mariano Rajoy al frente del partido como un adalid de la "integración real" en el PP, pero también de la defensa de la unidad de España, ese país de "los balcones y las banderas" que quiere liderar.

En un tono mitinero, dirigido a futuros electores y no solo a los afiliados del partido, Casado ha repasado sus principales propuestas y ha reivindicado lo hecho por el partido tanto en defensa de las víctimas de ETA como frente el desafío soberanista en Cataluña, ante el que ha prometido la misma "firmeza" que tuvo Rajoy.

No ha habido grandes sorpresas en esta presentación de su programa ante el plenario del congreso extraordinario, ni siquiera en los nombres que le acompañan en su lista al Comité Ejecutivo Nacional, en la que está su director de campaña, Teodoro García Egea, y los hasta ahora vicesecretarios Javier Maroto y Andrea Levy.

También cuatro exministros, Dolors Montserrat, Juan Ignacio Zoido, Rafael Catalá e Isabel García Tejerina, que apoyaron en la primera a María Dolores de Cospedal.

A diferencia de la otra candidata, Soraya Sáenz de Santamaría, Casado no ha querido decir el nombre de quien pondría al frente de la Secretaría General, ni el resto de los cargos, ya que ha reiterado que si gana su lista está abierta para la integración con la otra "al máximo nivel".

A Sáenz de Santamaría le ha agradecido la campaña "limpia y ejemplar" y le ha ofrecido en varias ocasiones la integración en su equipo si se convierte en el presidente del PP.

En lo que también ha insistido Casado en varias ocasiones a lo largo de su discurso es en pedir a los compromisarios que voten en libertad, con la cabeza y con el corazón, que voten lo que quieran "sin identificaciones ni etiquetas". "Merecéis votar y elegir, es vuestra decisión, soberana, libre y democrática", ha enfatizado.

Ha apelado personalmente a ellos, y ha defendido su legitimidad para elegir en esta segunda vuelta al líder del partido, al asegurar que él los necesita "y toda España" para salir "más fuertes y más unidos que nunca" de este XIX Congreso extraordinario del partido.

"Somos el partido de las víctimas del terrorismo de las nuestras y de las demás", ha exclamado Casado, quien ha definido además al PP como el partido "de la familia y de la vida" y ha garantizado que se opondrá a la ley de la eutanasia del PSOE por "innecesaria e injusta".

El también vicesecretario de Comunicación del PP ha sido el único que ha dado un agradecimiento expreso a Cospedal y su labor como secretaria general, en la que "ha dado la cara en las peores circunstancias del partido", ha afirmado.

Un reconocimiento que emocionó a quien también fue candidata en este proceso interno, aunque no pasó la primera vuelta, que se puso en pie para recibir el aplauso de los presentes.

Los agradecimientos los ha hecho extensivos a Rajoy, sobre quien ha dicho que está "tremendamente orgulloso" de haber sido su portavoz "en las peores circunstancias" y ha destacado que siempre ha reivindicado al PP como el "mejor partido para los españoles y su "firmeza" ante el desafío independentista.

Casado ha destacado la "honestidad" como uno de los principales principios que vertebran al PP. "Aquí no cabe un solo corrupto", ha dicho durante la defensa de su candidatura, en la que ha sido aplaudido en varios momentos por los compromisarios al grito de 'presidente, presidente'.

Tal y como constató al principio de su discurso, el ambiente estaba muy caldeado en el plenario del congreso, y no solo por las altas temperaturas, y este clima fue incrementándose hasta el final cuando culminó su discurso con un "Viva el PP y viva España" que fue coreado por los asistentes.