El pleno del Congreso rechazará hoy una iniciativa de Esquerra Republicana de Catalunya que pretendía el beneplácito de la Cámara Baja a un diálogo bilateral entre Cataluña y España.
A la espera de la votación, la moción no saldrá adelante por el rechazo de los partidos constitucionalistas, PP, PSOE y Cs.
En su defensa de la propuesta, el portavoz de ERC, Joan Tardá, ha advertido que sin diálogo bilateral al Estado solo le quedará intensificar la "estrategia represiva" contra los anhelos independentistas defendidos por una "buena parte" de los catalanes.
Ha dicho que el diálogo entre Gobierno y Generalitat es imprescindible para lograr la normalidad y que sin el consentimiento de la mayoría de los catalanes no podrá haber solución.
"No se puede retener Cataluña a garrotazos", ha avisado Tardá, quien ha acusado al Estado de pretender equiparar el "procés" con una rebelión violenta, cuando "el mundo se ha admirado por su carácter masivo, cívico y pacífico".
Tras acusar a la Justicia de pretender condenar a los dirigentes separatistas vulnerando sus derechos, ha señalado que ahora se prepara una "causa general contra el independentismo" con el único propósito de "descabezarlo" y "sustituir" a sus representantes.
El diputado catalán, que ha comparado a los dirigentes independentistas con históricos pacifistas como Gandhi y Nelson Mandela, ha asumido el rechazo del Pleno a la moción, pero ha asegurado que seguirán pidiendo diálogo bilateral.
En la misma línea, Carles Campuzano, del PdeCat, ha subrayado que el bloque mayoritario en el Parlament sigue siendo independentista pero no se respeta, a la vista de las "maniobras" que se están haciendo para tratar de impedir la investidura de Carles Puigdemont. Apelando a "la lucha por la libertad y la democracia de los catalanes", que es también, ha dicho, una lucha por la democracia española, Campuzano ha hecho un llamamiento al PSOE, al que ha acusado de estar "renunciando a defender la democracia española apoyando al PP" en este asunto.
Los independentistas catalanes se han llevado el duro reproche de PSOE, Ciudadanos y PP y el apoyo de PNV y de Unidos Podemos.
El socialista Marc Lamuá ha arremetido contra ERC y su "seguidismo servil y acrítico" hacia Puigdemont y ha acusado al partido republicano de actuar como "lacayos al servicio del poder convergente". Lamuá ha invitado a Tardá a apoyar la enmienda socialista, la cual defendía el diálogo bilateral siempre que se forme gobierno y que ERC ha rechazado, y a liberarse del "yugo" de Puigdemont. En cualquier caso, ha hecho notar que ERC no puede pedir el apoyo del Congreso tras haber vulnerado el Estatut y desobedecido la Constitución, y también ha subrayado que el independentismo no tiene legitimidad para proclamar o impulsar la independencia porque no cuenta con la "mayoría social" catalana ni tiene más de la mitad de los votos.
"¿En qué país viven ustedes? Hemos ganado nosotros y la mayoría social no es independentista", ha recalcado, por su parte, Juan Carlos Girauta, de Ciudadanos, para quien la petición de diálogo "bilateral" solo encierra la intención de los soberanistas de mantener privilegios. Pero ha dicho que "el primer partido de Cataluña no quiere privilegios para nadie, ni siquiera para los catalanes", tras lo que ha pedido al PP que se siga dando la "batalla intelectual y política al nacionalismo".
Dura ha sido también la diputada del PP Alicia Sánchez-Camacho, que ha comenzado señalando a Tardá de que no puede dar lecciones de diálogo tras el "golpe de Estado" que han tratado de perpetrar los independentistas.
Sánchez-Camacho ha admitido estar de acuerdo con Tardá en la necesidad de que se "sacrifique" políticamente a Puigdemont y ha asegurado coincidir en casi todo con Girauta, aunque ha pedido a Cs que demuestre que ha ganado los comicios tomando la iniciativa e impulsando una investidura "aunque sea para perder".
El apoyo a la moción sólo ha llegado del PNV y Unidos Podemos. Por el grupo vasco, Aitor Esteban ha señalado que esta propuesta tenía "toda la lógica" porque simplemente habla de la necesidad de diálogo para solucionar un problema político.
Problema que persiste porque, según ha subrayado, el 21 de diciembre una mayoría de votantes ratificó que "Cataluña se siente nación" y "le gustaría decidir", pero "el Estado" insiste en negar ese hecho y sus tres poderes están "conjuntados" para que Carles Puigdemont no sea elegido presidente".
Josep Vendrell, de Unidos Podemos, ha subrayado que el diálogo es el único camino y, aunque ha valorado que ERC abandone la vía unilateral, ha observado que primero es necesario recuperar el autogobierno y para ello, elegir una presidencia y un Govern que pueda ejercer como tales.
"No dos presidencias y dos gobiernos. Basta ya de jugar con las instituciones", ha dicho y ha pedido a ERC pare los "chantajes" de Junts pel Cat y al PP y Cs que abandonen la "imposición" para evitar "cronificar" el conflicto.