El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha reafirmado hoy el compromiso de seguir luchando contra el terrorismo con todos los instrumentos del Estado de Derecho y ha asegurado que "España nunca olvidará a sus víctimas".
Posada dirigía estas palabras al hemiciclo antes de que buena parte de los miembros del Gobierno, el presidente del Senado, Pío García Escudero, y diputados y senadores en la Cámara guardaran un minuto de silencio en homenaje a las víctimas del terrorismo.
En su representación han acudido varios colectivos como la Fundación de Víctimas del Terrorismo, representadas por María del Mar Blanco y la presidenta de la Asociación 11M Afectados del Terrorismo, Pilar Manjón, algunas asociaciones autonómicas como la canaria.
Después de dos años de ausencia - éste es el cuarto homenaje a las víctimas en el Congreso-, la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, también ha asistido al acto tras aceptar el compromiso de Posada de que el próximo año se dará voz a las víctimas.
"El testimonio y la autoridad moral de las víctimas ha sido decisivo, saben lo que es dolor y son las más legitimadas para reclamar la concordia", ha destacado Posada quien ha asegurado que, aunque se hubiese logrado vencer definitivamente al terrorismo "España nunca olvidará a sus víctimas".
Porque, ha dejado claro, la sociedad española tiene "una deuda moral" con las víctimas, cuyo "infatigable deseo de paz" ha permitido preservar el marco de convivencia democrático.
Su "firme y valioso testimonio de confianza inquebrantable en la democracia", ha añadido Posada hace importante mantener "vivo en la memoria el alto precio que han pagado injustamente".
Un agradecimiento que sería "estéril o insuficiente", en palabras del presidente del Congreso, si el reconocimiento no fuese de la mano del "renovado" compromiso con la lucha contra el terrorismo.
"Reafirmamos hoy una vez más el deseo de seguir combatiendo contra el terrorismo con todos los instrumentos del Estado de Derecho y reafirmamos nuestra condena mas enérgica de cualquier exaltación o enaltecimiento", ha añadido.
PEDRAZA: "LAS VÍCTIMAS SOMOS LAS QUE TENEMOS QUE HABLAR"
Al término del homenaje, y ya en salón de Pasos Perdidos, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, han conversado con algunas víctimas, entre ellas Pedraza, quien también ha intercambiado palabras con el presidente del Congreso.
En declaraciones a Efe, la presidenta de la AVT, Ángeles Pedraza, ha negado que su asistencia al homenaje del Congreso haya sido fruto de una "cesión" o de un "chantaje" y ha recordado que su ausencia en años anteriores se ha producido con gobiernos del PSOE y del PP.
Pedraza ha agradecido el gesto del presidente del Congreso, Jesús Posada, de que el año que viene se dará la palabra a las víctimas porque considera "somos las que tenemos hablar".
Ha alabado el discurso de Posada porque ha reconocido la deuda impagable que tiene la sociedad con las víctimas y no se ha olvidado de que hay que seguir trabajando para conseguir la derrota definitiva de ETA.
María del Mar Blanco, según ha dicho a Efe, sólo tiene palabras de agradecimiento al presidente del Congreso por su mensaje de "cercanía y solidaridad" con las víctimas, que mantienen la memoria como base en este "relato final" del terrorismo y en el que queda claro quiénes son las víctimas y quiénes los verdugos.
No ha echado nada en falta en el discurso institucional y ha dado también las gracias a las fuerzas políticas democráticas y a la sociedad española "por no olvidar", de la misma manera que ha destacado, como ha hecho también Posada, el "sacrificio" y la excelente labor de las fuerzas de seguridad para llegar a este punto del fin de ETA.
El acto ha contado con la presencia de la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril; los presidentes del Tribunal Supremo y Constitucional, Gonzalo Moliner y Francisco Pérez de los Cobos, algún vocal del Consejo General del Poder Judicial, entre ellos Margarita Robles; la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y el expresidente del Congreso, José Bono.
Entre las ausencias, la de Asociación Voces contra el Terrorismo, presidida por Francisco José Alcaraz, y el colectivo de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco, Covite, cuyos representantes han explicado a las puertas del Congreso que no acudían al homenaje porque en el acto se evidencia "una sintonía entre el poder político y los damnificados por ETA que no existe".
La declaración del 27 de junio como día de las víctimas del terrorismo se acordó de forma unánime en el Congreso en 2010 y se eligió esa fecha para recordar a la niña Begoña Urroz, asesinada ese día en 1960 y considerada la primera víctima mortal de la banda terrorista ETA.
En 2010 se celebró el primer homenaje solemne en el salón de plenos del Congreso con asistencia de los Reyes.