El Constitucional permite por unanimidad que el Parlament debata la moción independentista

  • Su suspensión constituiría "un control sobre una resolución que no se ha adoptado y cuyo contenido se desconoce"
  • Rajoy: el Ejecutivo recurrirá la resolución independentista si el Parlamento de Cataluña la aprueba el lunes

El Tribunal Constitucional ha rechazado por unanimidad que se suspenda la tramitación de la resolución independentista pactada entre Junts pel Sí y la CUP, que está previsto que se debata el próximo lunes en el pleno del Parlamento catalán. Considera el Alto Tribunal que su suspensión constituiría "un control de constitucionalidad sobre una resolución que no se ha adoptado y cuyo contenido se desconoce".

Los once magistrados se han reunido en una sesión plenaria en la que por la mañana han acordado admitir a trámite los recursos de amparo del PP, PSC y Ciudadanos por la vulneración de su derecho fundamental a la participación política en la cámara autonómica.

Por unanimidad han rechazado esta medida por el "riesgo" de que el pleno del próximo lunes apruebe una resolución para iniciar el proceso independentista, ya que la Constitución, argumentan, asigna a cada institución un determinado momento para actuar, que este no es el del Tribunal Constitucional, sino el del Parlamento catalán.

"Es a la propia cámara autonómica a la que corresponde velar por que su actuación se desarrolle en el marco de la Constitución", recuerdan los magistrados, que destacan que el Parlament es la "sede natural del debate político".

Las asambleas parlamentarias, insisten, deben vigilar por el cumplimiento de la Constitución y la ley, sin perjuicio "de que la última palabra" corresponde al Tribunal Constitucional. En este sentido, apelan a la sentencia que anulaba por inconstitucional la declaración de soberanía adoptada por el Parlamento catalán del 23 de enero de 2013.

Los jueces incluyen una advertencia y argumentan que las resoluciones de un poder público, "cualquiera que sea", no afectan a las competencias del Tribunal Constitucional, que "ejercerá, cuando proceda, con prudencia y determinación".

Los magistrados añaden que "el eventual resultado del debate político -la resolución independentista- es una cuestión que no debe condicionar anticipadamente la viabilidad misma del debate" y, por ello, se oponen a prohibirlo.

Además, el pleno ha acordado dirigirse al Parlamento de Cataluña para que en un plazo que no exceda de 10 días "remita certificación o fotocopia adverada de las actuaciones parlamentarias correspondientes a los acuerdos impugnados".

EL GOBIERNO PENDIENTE

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, incidió este jueves en que el Ejecutivo recurrirá "a la mayor brevedad" la resolución del inicio del proceso independentista si la aprueba el próximo lunes el Parlamento de Cataluña. "Lo haremos a la mayor brevedad posible para velar por el cumplimiento de la ley", destacó.

Si, como es previsible, el Parlament aprueba el lunes la moción, el Gobierno prevé impugnarla sin falta el martes 10 de noviembre. Para ello, según han indicado fuentes del Ministerio de Justicia, se reuniría a primera hora de la mañana el Consejo de Estado para emitir su preceptivo informe y, una vez cumplido ese trámite, lo haría el Consejo de Ministros para autorizar el recurso ante el Constitucional.

En principio, sería un representante de la Abogacía del Estado el responsable de presentar el recurso en la sede del tribunal de garantías, aunque no se descarta que lo haga directamente un miembro del Gabinete de Mariano Rajoy.

El Gobierno pedirá al Constitucional la suspensión cautelar de la iniciativa aprobada en aplicación del artículo 161.2 de la Carta Magna, que establece la suspensión automática durante un plazo de cinco meses de una norma autonómica cuando la impugne el Ejecutivo central.

De ese modo, según los cálculos con los que trabaja el Ejecutivo, el Tribunal Constitucional podría reunirse el miércoles 11, admitir a trámite el recurso del Ejecutivo y dejar en suspenso la iniciativa independentista.

LOS RECURRENTES ACATAN

El líder del PP catalan en el Parlament, Xavier García Albiol, ha admitido que a los populares catalanes no les gusta que el Tribunal Constitucional decida permitir el pleno del Parlament que debatirá la moción secesionista, pero acatarán esta resolución, "como no podía ser de otra manera". "Lo que nos diferencia entre ellos y nosotros es que nosotros acatamos las resoluciones judiciales nos gusten o no, nos den la razón o no, mientras que ellos solo lo hacen cuando van en la dirección que consideran oportuna o que les gusta", ha dicho Albiol en referencia a los soberanistas catalanes.

El dirigente del PPC ha advertido en cualquier caso de que su grupo estará en el pleno del lunes en el Parlament para defender "de manera clara y sin ningún tipo de complejos" a todos aquellos hombres y mujeres que quieren "seguir sintiendo españoles". En cualquier caso seguirá con su defensa "para que los independentistas lo tengan claro: nadie va a romper Cataluña del resto de España", ha concluido Albiol.

La presidenta del grupo parlamentario de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha asegurado que acata la decisión del Tribunal Constitucional. "Como demócratas, respetamos las decisiones judiciales, aunque no las compartamos". Para Arrimadas, se trata de una resolución "muy grave" porque representa un "llamamiento a la desobediencia". "Este tipo de resoluciones en los países democráticos de nuestro entorno no se aprobarían en un Parlamento".

En declaraciones a la salida del encuentro con la presidenta, Arrimadas ha destacado que los diputados de C's se han sentido "desamparados por su gestión". "Desde C's trabajamos para que no se tenga que aplicar el artículo 155 de la Constitución, pero la declaración de JxSí y la CUP, y las actuaciones de la Mesa lo ponen difícil", ha dicho.

El líder del PSC, Miquel Iceta, consideraba que era previsible que el Tribunal Constitucional no adoptara medidas cautelares y ha destacado que su grupo mostrará su rechazo "total" al texto cuando se debata en el pleno. Iceta ha recordado que si el PSC pidió amparo al Tribunal Constitucional "no era para que suspendiera el pleno, sino para que valorara si se han vulnerado derechos de los diputados y si la Mesa podía admitir a tramite la propuesta saltándose los procedimientos". "Nosotros hemos ido al TC a reivindicar unos derechos pisoteados".

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy volvió a llamar hoy a "algunos a que recuperen el sentido común que nunca deberían haber perdido", lamentó que el "proceso" que han iniciado Junts pel Sí y la CUP va "contra el futuro", "lo que nos une" y "por dónde va el mundo".

"He tenido conversaciones con algunas fuerzas políticas y lo más importante es que estemos todos juntos", aseguró.