Cortan autopistas y carreteras en el inicio de la huelga general en Cataluña

Grupos de huelguistas cortan varias autopistas y carreteras catalanas, así como las principales arterias de Barcelona de forma intermitente, desde primera hora de este jueves, en el que está convocada una huelga general por el sindicato independentista Intersindical-CSC para protestar por el juicio del 'procés'.

Según han informado a Efe fuentes policiales, la Avenida Diagonal está cortada en la Zona Universitaria de Barcelona, en la Gran Vía se producen interrupciones de la calzada a la altura del edificio de La Campana, y en la Avenida del Paral·lel los cortes se producen junto a las "Tres Chimeneas".

Asimismo, ha habido intentos de cortar la Ronda de Dalt en la zona de Can Caralleu.

Respecto de las incidencias de tráfico, hacia las 7 de la mañana se mantenían cortadas la AP7 en los dos sentidos de la marcha en Viloví d'Onyar (Girona), en Hospitalet de l'Infant (Tarragona) y en Llinars del Vallès (Barcelona).

La AP2 está cortada en los dos sentidos en Sidamón (Lleida) y la C-60, en la Roca del Vallès (Barcelona) en sentido norte.

Los manifestantes también mantienen cerrada la N-340 en Camarles (Tarragona) en los dos sentidos de la marcha y la N-260 en Lles de la Cerdenya también en ambos sentidos.

La autopista C-32 también permanece cortada en Masnou (Barcelona) en sentido norte y la A2 en Tarrega (Lleida) está cortada en sentido Barcelona.

Neumáticos en la calzada

Los cortes han empezado a las 4.30 de la mañana en la AP7 en Parets del Vallès y han continuado en diversos puntos de la autopista, tanto en la provincia de Tarragona como en la de Girona.

En algunos de estos tramos, como en la AP-7 en L'Hospitalet del Infant y en Viloví d'Onyar o en la C-55, en Olesa de Montserrat (Barcelona) los huelguistas han interrumpido la circulación colocando neumáticos en medio de la calzada que han incendiado.

El sindicato independentista Intersindical-CSC ha convocado una huelga general en Cataluña en protesta por el juicio del 'procés' que se celebra en el Tribunal Supremo, una jornada que cuenta con el apoyo de medio centenar de entidades soberanistas y el aval del Govern, que suspenderá su agenda política pública por esta convocatoria.