El candidato de IU-Unidad Popular a la presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, ha apelado esta mañana en Valladolid al voto de los indecisos para que la formación que lidera pueda "consolidar un grupo parlamentario propio" que ponga fin a las políticas que atenten contra las clases sociales "más populares".
"No encaminamos al Parlamento más fragmentado desde 1978", donde el grupo de IU-Unidad Popular "puede resultar absolutamente imprescindible y determinante" para que las políticas no vayan en contra de las clases sociales "más populares", ha explicado Garzón al reclamar para sí el "voto útil" de los más vacilantes.
A falta de cinco días para la conclusión de la campaña electoral, el líder de IU-Unidad Popular cree que la opción que representa aún tiene un mayor margen de mejora que el que le asignan encuestas y sondeos, los últimos conocidos hoy de acuerdo con la normativa electoral vigente.
"El partido aún está por jugar, vamos a romper las encuestas y a dar la sorpresa para garantizar un grupo parlamentario propio", ha insistido antes de volver a pedir el voto de los inseguros "para transformar la sociedad y construir un nuevo país", ha declarado a los periodistas antes de protagonizar un mitin en la Sala Borja y de seguir camino a Gijón.
Las encuestas difundidas hoy, según Garzón, asignan a IU-Unidad Popular una tendencia al alza que pretende reforzar en esta recta final de campaña con el voto de los inseguros.
"Vamos a gastar todas nuestras energías en ello, a convencer a la mayor cantidad de gente posible a realizar un esfuerzo todavía mayor para demostrar que el voto más útil es el nuestro para acabar con los recortes en la educación, sanidad y servicios sociales", ha insistido.
Acerca de sus rivales, especialmente tras la irrupción en campaña de un presunto caso de corrupción en las filas del PP, ha expresado su convencimiento de que este partido "está asustado por las encuestas", lo que a su juicio ha influido en el diferente modo de afrontar las supuestas prácticas irregulares de Pedro Gómez de la Serna, número dos de los populares al Congreso por Segovia.
Con dudas al principio y más contundente ahora al pedir a Gómez de la Serna su renuncia como candidato, el PP "se ha dado cuenta de que la población no tolera por más tiempo la indecencia y la corrupción" de quienes "reciben remuneraciones por parte de empresas privadas para las que legislan".
Garzón ha exigido en este punto una ley y un reglamento de incompatibilidades "más duros" para penalizar este tipo de comportamientos y evitar situaciones como la que ha denunciado.
El actual reglamento de incompatibilidades del Congreso de los Diputados "es muy laxo y muy débil", especialmente para los parlamentarios que lo incumplen, ha agregado antes de pedir a la Justicia que investigue "mientras nosotros vamos a trabajar para impedir que los diputados puedan lucrarse desde empresas privadas "para las que legislan".
Por último, en materia de empleo, ha anunciado su intención de apoyar la derogación "en el más corto espacio de tiempo" de las dos últimas reformas laborales, protagonizadas por gobiernos del PP y PSOE, y pedido a los gobernantes que "pisen el suelo de la calle", el mismo que la "mayoría social" para comprobar así "las consecuencias de la precariedad del empleo".
Más de mil personas han llenado la Sala Borja en la capital vallisoletana para escuchar al líder de IU, quien ha departido a la entrada con miembros de las plataformas "Parados en Movimiento", de los afectados por la hepatitis C, de los defraudados por el caso Fórum Afinsa y con la nieta de un represaliado durante la Guerra Civil.