(Actualizado

La presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, avisa de que el Gobierno "actuará" de acuerdo a la Constitución en caso de que la Generalitat o la Asamblea Nacional Catalana (ANC) impulsen "medidas antidemocráticas" o "no pacíficas", como una declaración unilateral de independencia o tomar el control de fronteras e infraestructuras catalanas.

"Exijo urgentemente que el Govern se separe de la ANC, que está impulsando medidas antidemocráticas, está fijando una declaración unilateral, está declarando como enemigos de Cataluña a casi medio millón de catalanes que votan al PP, y está impulsando medidas claramente fuera de la ley y la democracia", ha afirmado.

En una entrevista, Sánchez-Camacho ha opinado que los catalanes "no se merecen un Govern que tenga como socio no solo a ERC, sino también a la ANC", una organización que "impulsa medidas absolutamente antidemocráticas y no pacíficas, como controlar puertos, aeropuertos y fronteras con España".

La asamblea de la ANC aprobó recientemente su hoja de ruta, donde afirmó que las "autoridades", y no los ciudadanos, tomarían "el control de las grandes infraestructuras y fronteras, la seguridad pública y las comunicaciones", entre otros aspectos, tras una hipotética declaración de independencia.

"Les aseguro que si se toman medidas antidemocráticas y que vulneren los derechos de todos y la convivencia, evidentemente el Gobierno y el PP actuarán como corresponde de acuerdo con la Constitución", ha aseverado la líder del PPC.

Si bien ha evitado posicionarse sobre si la ANC debería ser ilegalizada, Sánchez-Camacho ha cargado duramente contra el Ejecutivo catalán, al considerar que está dando apoyo a esta entidad y utilizándola como un "instrumento" que le está resultando "muy útil" al president Artur Mas en sus aspiraciones soberanistas.

"LA ANC ESTÁ MARCANDO LA HOJA DE RUTA INDEPENDENTISTA"

Algo que es "muy peligroso y preocupante", ya que, a su juicio, la ANC está "marcando la ruta del proceso independentista" y resulta "claramente imprevisible" lo que pueda suceder desde el 11 de setiembre, fecha de la manifestación convocada en Barcelona para la Diada de Cataluña, y el 9 de noviembre, día de la eventual consulta.

"Pido y exijo al Govern que si quiere seguir garantizando la convivencia y ser el gobierno de todos los catalanes, se separe de la hoja de ruta de la ANC, que está impulsando medidas no pacíficas para los próximos meses", ha reiterado.

En todo caso, la líder del PPC ha celebrado que ni el Gobierno ni el PP "hayan caído en la provocación" ni el "victimismo" hasta ahora, y estén manteniendo la "absoluta serenidad" y la garantía del respeto al "marco democrático".

En todo caso, ha dejado claro que "no hay otro camino que el de la democracia con la ley", por lo que el presidente español, Mariano Rajoy, "hará lo que tiene que hacer" ante un Mas que "ha iniciado un camino hacia el fracaso" y que va "de error en error".

En concreto, ha acusado a Mas de "intentar burlar la legalidad española", ya que "a partir del 8 de abril, Mas no tiene competencias para hacer ningún referéndum en Cataluña" y, por lo tanto, la ley de consultas que el president tiene previsto que esté aprobada en setiembre supondría un "atajo" y "un camino que le permita incumplir la legalidad".

Un escenario en el que el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, "ya hace tiempo que ha dejado de ser interlocutor, no solo con el Gobierno, sino dentro de la propia CiU", por lo que "la única tercera vía posible es que él se separe de CDC y que sus trece diputados (en el Parlament) evitasen el proceso independentista que están permitiendo día a día".

"Pero confío en que el 'seny' (sensatez) se impondrá finalmente -ha apuntado-. Pero la incertidumbre, la preocupación y el abocar a Cataluña a un referéndum ilegal es el error más grave que está cometiendo Mas. La historia, al final, le pasará factura".