La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, ha ofrecido este viernes un balance de la situación de acogida de refugiados por parte de España, que ha recibido a 124 personas de las 16.000 que se ha comprometido con la Unión Europea a acoger hasta 2017 y que recibirá, según ha anunciado, a 285 más procedentes del Líbano "la próxima semana o la siguiente".
Conforme ha detallado, al cierre de junio habrán llegado 144 personas reubicadas desde Grecia e Italia en el marco del programa europeo para buscar una solución duradera a 160.000 refugiados que se encuentran ya en territorio comunitario.
Asimismo, llegarán en las mismas fechas los 285 mencionados refugiados que serán reasentados desde Líbano en un programa por el que España se ha comprometido con la UE a acoger a 1.400 personas que se encuentran en campos de refugiados.
También este mes de junio, se prevé la llegada de los primeros refugiados procedentes de Turquía que serán trasladados a España en el marco del mecanismo uno por uno implantado con el acuerdo entre Bruselas y Ankara según el cual, por cada persona que las autoridades griegas devuelvan a suelo turco, los Estados miembros habrán de acoger a uno de los refugiados que están en el país. Según ha concretado la vicepresidenta en funciones, se prevé la llegada de 101 personas aunque son 90 las que ya están "documentadas", por lo que "la cifra variará" en estas horquillas.
Por otra parte, ha anunciado que el Gobierno ha autorizado al ministro del Interior en funciones a trasladar al Consejo de Ministros de Justicia e Interior de la Unión Europea que tiene lugar este viernes el plan de acogida de España para el siguiente trimestre.
En total, prevé reubicar en ese periodo a 200 refugiados procedentes de Grecia y a 200 reasentados desde Turquía. Precisamente, el titular de Interior, Jorge Fernández Díaz, ha declarado este viernes en Luxemburgo que al final de verano habrá 1.000 refugiados acogidos en España en el marco de estos programas.
"Lo que hacemos es fijar un calendario que se le transmite a la Unión Europea, que da continuidad en todo el programa y facilita a las instituciones españolas la acogida y el diseño de los procesos de integración de estas personas", ha dicho Sáenz de Santamaría, para quien el Ejecutivo está "en la tarea" de cumplir sus compromisos con Bruselas.