(Actualizado

El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, ha subrayado que el Gobierno actuará "con la máxima contundencia" para que los ataques contra el sector turístico no se repitan "ni un día más", y ha avanzado que se ha puesto en contacto con los ministerios de Interior y Justicia.

La organización Endavant, que forma parte de la CUP, se ha responsabilizado de nuevos ataques y sabotajes a establecimientos relacionados con el turismo en Barcelona, como consignas de maletas y negocios de alquiler de bicicletas a turistas. La comisión de Presidencia y Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona se reunirá el próximo lunes con carácter extraordinario para analizar la situación.

Nadal ha explicado, en declaraciones a Efe, que la Abogacía del Estado estudia la posibilidad de personarse en defensa de los trabajadores, de las empresas y del sector turístico. El objetivo, según el titular de Turismo, es analizar hasta dónde se puede instar a la Fiscalía para que actúe contra quienes han perpetrado esos actos y contra las organizaciones que los promueven.

Nadal ha señalado que, ayer mismo, mantuvo contactos con los ministerios de Interior y de Justicia "para actuar con la máxima contundencia".

Además, se ha abierto "una célula de crisis" en el seno de Turespaña para comprobar la repercusión en otros países. El ministro ha hecho hincapié en que cada administración debe actuar en el ámbito de sus competencias.

Según Nadal, igual que el Gobierno ha puesto en marcha un dispositivo con la Guardia Civil y la Policía para investigar estas actuaciones, las autoridades catalanas y vascas, que tienen competencias en materia de Interior, deberían hacer algo parecido. Numerosos responsables autonómicos y locales y representantes de empresas y sindicatos han condenado la "turismofobia".

El presidente de la Comisión de Turismo de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), José Francisco Hila, ha indicado que hay "oportunistas" que se apuntan a la turismofobia porque les da "visibilidad". En una entrevista con Onda Cero, el también alcalde de Palma ha remarcado que las ciudades que viven del turismo están "preocupadas".

El vicepresidente del Gobierno balear y conseller de Turismo, Biel Barceló, ha rechazado la protesta organizada en julio por la organización juvenil Arran Paisos Catalans, pero ha defendido la "redistribución de la riqueza" y unas "condiciones adecuadas" para los empleados del sector.

El secretario de Turismo de la Comunidad Valenciana, Francesc Colomer, se ha mostrado también en contra y ha dicho que el problema no es el turismo sino el intrusismo desleal y los apartamentos clandestinos. Colomer ha señalado que no ve posible que en la Comunidad Valenciana se den estos casos, porque se "ha entendido siempre este sector".

En Canarias, el Consejo de Gobierno ha analizado los ataques contra el sector, según la portavoz del Ejecutivo regional, Rosa Dávila. El nuevo titular de Turismo, Cultura y Deportes, Isaac Castellano, ha transmitido al resto del gabinete un mensaje de tranquilidad.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha expresado su "condena absoluta" a la "turismofobia", fenómeno -ha dicho- "propiciado por la extrema izquierda" que ataca la "gran fuente de ingresos que es para España el turismo".

La consejera vasca de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, ha lamentado que algunos busquen "la excusa de la masificación del turismo en Euskadi, que no es cierta, para convocar la manifestación de todos los veranos". Ernai, la organización juvenil de Sortu, ha convocado una protesta el próximo 17 de agosto en San Sebastián, en plenas fiestas, para protestar por el modelo de turismo.

El alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, ha criticado que "todos los males se achaquen ahora al turismo" y ha pedido "rigor" en los debates. En el ámbito empresarial, la Asociación Mallorquina de Cafeterías, Bares y Restaures ha reclamado "medidas urgentes y severas" para atajar las protestas violentas, y el sindicato CCOO ha condenado los "actos vandálicos" y ha pedido políticas que apoyen un turismo "sostenible" y "socialmente responsable".