Unidos Podemos, el PSOE, el PNV, el PDeCAT y Compromís han rendido este miércoles homenaje a distintos colectivos de luchadores antifranquistas, a los que han definido como "héroes" de la democracia, en un acto que ha tenido lugar poco antes de la conmemoración oficial del 40 aniversario de las elecciones generales de 1977, organizado por la Cámara Baja bajo presidencia del Rey.
El emotivo homenaje, organizado por Podemos, Izquierda Unida, En Comú Podem y En Marea ha tenido lugar en una sala de una de las ampliaciones del Congreso y en él han participado entre otros, militantes del PCE y su secretario general José Luis Centella, sindicalistas, familiares de las víctimas de los sucesos de Vitoria de 1976, miembros de la asociación de niños robados y homosexuales represaliados.
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha denunciado que la Transición "invisibilizó" a estos luchadores y "premió" a los represores, ha vinculado aquella lucha con el 15M y ha reconocido al PCE como "la fuerza que más luchó contra la dictadura y por la democracia".
La responsable de Memoria Histórica de Podemos, Ana Domínguez, ha dejado claro, que su formación no puede permitir que "se equipare" a quienes "lucharon por los valores de la democracia y la justicia social" con quienes fueron sus "represores", entre los que ha nombrado al exministro del Interior Rofolfo Martín Villa, uno de los constituyentes que este miércoles serán condecorados por el Rey.
MARTIN VILLA QUIERE DECLARAR EN ARGENTINA
Precisamente la hermana de unos de los cinco obreros asesinados el 3 de marzo de 1976 en una Iglesia de Vitoria que albergaba una asamblea de trabajadores ha explicado que el propio Martín Villa, ministro cuando sucedieron los hechos, le ha confesado este miércoles en el Congreso, que son "los estamentos del Estado" los que no le permiten ir a declarar a Argentina en la causa abierta por los crímenes de franquismo por la jueza María Servini, aunque él quiere hacerlo para defenderse.
Uno de los impulsores de esa querella en Argentina también ha tomado la palabra para vincular la "impunidad" de los represores con la corrupción actual. "¿Cómo no van a robar ahora si han quedado impunes los peores de los crímenes y hasta han robado niños?", se ha preguntado. De su lado, el líder de IU, Alberto Garzón, ha denunciado que "muchas de las fortunas que hoy manejan la democracia ya tenían ese mismo poder en la dictadura".
ERRORES NO RECONOCIDOS Y PERDONES NO PEDIDOS
Desde el PSOE, el diputado Odón Elorza, ha remarcado que los "claroscuros" de la Transición no deben impedir defender aquel proceso, en el que, ha reconocido, hubo "páginas oscuras". "Hay errores que no se han reconocido y perdones que no se han pedido", ha dicho, reclamando que no se asimile "memoria a odio" y garantizando que el PSOE seguirá luchando por el reconocimiento a las víctimas del franquismo entre las que hay muchos socialistas.
El portavoz del PNV, Aitor Esteban, ha hecho hincapié en que la Transición no fue "idílica" porque se hizo bajo la "presión de los poderes fácticos", mientras que Joan Baldoví, de Compromís, ha dicho que el acto oficial del Congreso se habría quedado "cojo" sin el homenaje a los antifranquistas, que fueron "injustamente" tratados y a los que hay que "pedir perdón" y "reparar", según el portavoz del PDeCAT, Carles Campuzano.
De su lado, el portavoz de En Comú, Xavier Domènech, ha recordado a las 188 personas que murieron víctimas de la "violencia institucional" en la Transición, frente a las cuatro que perdieron la vida en la Revolución de los Claveles portuguesa. "A veces, las revoluciones son mejores que las transiciones", ha asegurado, arrancando el aplauso de los presentes.