Los dos miembros del servicio de extinción de incendios de la Xunta fallecidos hoy en Fornelos de Montes (Pontevedra) tenían 27 y 35 años y llevaban cinco y siete campañas de experiencia en la lucha contra los incendios forestales, según el Ejecutivo gallego.
Los conselleiros de Presidencia y de Medio Rural, Alfonso Rueda y Samuel Juárez, han explicado en una comparecencia ante los medios en Pontevedra, retransmitida por la Radio Galega, que todo parece indicar que el incendio ha sido provocado, por lo que han calificado lo sucedido como un "acto criminal".
El fuego comenzó de noche
Juárez ha indicado que el incendio comenzó sobre las 22.30 horas y que los fallecidos formaban parte de la primera brigada que acudió al lugar, sobre las 22.49 horas. Todavía se desconocen las causas por las que se separaron del grupo, ya que a las 23.05, quince minutos después de llegar, ya se dio la primera alarma de que se había perdido el contacto con ellos.
Diez minutos después de la medianoche, los brigadistas fueron encontrados muertos por sus compañeros. El conselleiro ha indicado que según los técnicos, "no era un incendio complejo inicialmente", aunque más tarde se complicó porque la brigada se concentró en buscar a los compañeros mientras el fuerte viento avivaba las llamas.
La Xunta da por controlado el incendio
La Consellería de Medio Rural ha dado por controlado el incendio registrado en Fornelos de Montes (Pontevedra).Según indica el departamento autonómico en un comunicado, el fuego ha quedado controlado sobre las 11.00 horas de este viernes tras haber arrasado, según las primeras estimaciones, unas cien hectáreas.
El conselleiro de Medio Rural, Samuel Juárez, ha indicado que el fuego presenta todos los indicios de haber sido provocado, por lo que tras el fallecimiento de los dos operarios, lo ha calificado de "acto criminal"
La difícil orografía del terreno ha hecho que Medio Rural se haya demorado en dar por controlado el incendio, ya que tras trabajar toda la noche a primera hora de la mañana quedaban pequeños focos de difícil acceso.
En los trabajos de extinción han participado ocho agentes forestales, dieciséis brigadas, diez motobombas, tres palas, cuatro helicópteros y un avión, entre otros medios.
