El Ministerio del Interior que dirige Fernando Grande-Marlaska, ha adquirido defensas semirrígidas, pelotas de caucho y espráis de defensa personal para la Policía Nacional, con el objetivo de mantener reservas suficientes de dichos materiales antidisturbios.
Según el contrato de compra de las porras, se adquieren un mínimo de 20.000 defensas semirrígidas con tahalí por 290.375 euros en un plan cuatrienal (2022 – 2025). La empresa adjudicataria ha sido Pielcu S.L., que se impuso en la licitación a Roal S.A. y a Shoke S.L. Los criterios que se midieron en el proceso fueron la facilidad de introducción y extracción del tahalí, portabilidad, facilidad de manejo, agarre, uso con guantes, operatividad policial y los acabados.
Las defensas debían ser “enterizas y fabricadas con un único material, polímero de alta resistencia, preparado para soportar temperaturas de entre -20 a 70ºC sin que se vea alterada su resistencia y/o comportamiento”.
En color negro, el cuerpo principal de las porras tenía que ser cilíndrico y con un acabado uniforme, terminando en su extremo superior en forma semiesférica. Un apunte importante, es que “no se permitirá en su estructura ninguna arista viva o borde afilado susceptible de causar algún tipo de lesión lacerante durante su utilización”. El peso requerido oscilaba entre los 250 y 410 gramos, siendo su longitud 60 centímetros.
La División Económica y Técnica de la Policía Nacional reclamaba igualmente una garantía de tres años a las empresas que acudieron al concurso.
Pelotas antidisturbios
Por otro lado, Interior tiene abierta una licitación para la adquisición de un mínimo de 39.000 pelotas de caucho de color negro para “reponer los consumos realizados y mantener las reservas establecidas por las Unidades de Intervención Policial (UIP) y Unidades de Prevención y Reacción (UPR).
En la memoria justificativa se señala que las unidades de orden público de la Policía Nacional (UIP y UPR) han de disponer de una serie de medios que les permitan hacer frente a concretos “incidentes susceptibles de comprometer la paz pública y la seguridad ciudadana”. Y destaca que “por las circunstancias extraordinarias a las que se ha de hacer frente en el presente ejercicio”, con especial mención a la Cumbre de la OTAN, “entra dentro de lo esperado que las reservas de este tipo de material puedan reducirse de forma considerable”.
La estimación del coste de la adquisición del citado material antidisturbios con destino al Servicio de Armamento y Equipamiento policial que se cifra en 70.785 euros.
A principios de mes, Interior formalizó un contrato por 175.450 euros para la compra de un mínimo de 10.000 espráis de defensa personal y un mínimo de 10.000 fundas para los mismos, con destino a la Policía Nacional durante los años 2022 y 2023.