La forense desaconseja la entrada en prisión de Griñán por el cáncer que padece

La forense del Instituto de Medicina Legal de Sevilla ha emitido un informe en el que desaconseja el ingreso en prisión del expresidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, condenado a seis años por el caso de los ERE, ya que está aquejado de "una enfermedad muy grave con padecimientos incurables".

El informe, al que ha tenido acceso EFE, es la respuesta de la forense al requerimiento que hizo la Audiencia de Sevilla al Instituto de Medicina Legal para que precisara su opinión en torno al ingreso en prisión de Griñán, condenado a seis años de cárcel, y que padece un cáncer de próstata.

La forense ha analizado el último informe médico aportado por Griñán, del 6 de junio, y concluye que, a pesar de haber finalizado el tratamiento de radioterapia, el cáncer no ha remitido y que son "preceptivas revisiones periódicas" y tratamientos que pueden posibilitar la remisión de la enfermedad, aunque insiste en que es "incurable".

Señala el informe firmado por la forense que hay que tener en cuenta que "solamente han pasado algunos meses" desde que a Griñán se le diagnosticó el cáncer en diciembre de 2022.

En la actualidad, continúa, "no existen criterios médicos que permitan hablar de remisión del cáncer que padece, por lo que estamos ante una enfermedad incurable".

Explica que no todos los procesos cancerosos son iguales y que las terapias son muy bien toleradas por algunas personas y no por otras, por lo que insiste en lo que ya apuntó en el informe que emitió el 24 de mayo sobre la necesidad de hacer un estudio individualizado del cada enfermo.

En el caso de Griñán, indica que "aunque alguno de los síntomas secundarios ha mejorado, otros persisten y exigen control periódico con excarcelaciones frecuentes. La astenia generalizada, además de otros síntomas, vuelve a hacer patente la dificultad de mantener una dinámica carcelaria".

También recuerda que la propia prisión dejó constancia en un escrito de los problemas que planteaban los continuos traslados de los penados al hospital para las consultas y los tratamientos externalizados.

"No se necesita solamente cuidados médicos en prisión, sino evitar, entre otros, el peligro de infecciones en personas con un sistema inmunológico deprimido y que pueden suponer riesgos vitales por la edad (77 años) y por la propia enfermedad", dice el informe.

En cuanto a la advertencia que el tribunal hizo al Instituto de Medicina Legal de que "no procedía" solicitar documentación de cada una de las revisiones que se hicieran a Griñán, la forense responde que solo pidió el resultado de la revisión que tenía prevista el 6 de junio porque se trataba de "una revisión esencial" tras la finalización de la radioterapia.

La Sección Primera de la Audiencia, que lleva el caso, ha trasladado a la Fiscalía y a la acusación particular el informe de la forense y les ha dado un plazo de dos días para que informen de la procedencia de la suspensión de la ejecución de la pena de prisión.