El doctor Miguel Cabanela, el especialista que operará al Rey Juan Carlos, es jefe del servicio de Cirugía Ortopédica de la prestigiosa Clínica Mayo de Rochester (EEUU). El jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, ha definido a Cabanelas como "uno de los mejores especialistas del mundo en cirugía de cadera", al anunciar ayer en rueda de prensa que Don Juan Carlos será operado por este doctor en Madrid durante los próximos días.
Cabanela, licenciado en la Facultad de Medicina de Santiago de Compostela en 1965, tiene más de cuatro décadas de experiencia en cirugía ortopédica y reconstructiva, especialmente en operaciones de rodilla y cadera, así como en necrosis vascular.
El cirujano gallego es autor de numerosos estudios y ponente en conferencias sobre los nuevos avances en operaciones de reconstrucción ortopédica.
Cabanela ha asegurado que el estado general del Rey "es bastante mejor" que el de la media de pacientes que opera, ya que es "un hombre vigoroso" que "está muy bien para su edad" y que toma "pocas medicaciones".
Ha explicado asimismo que una infección como la que afecta ahora a Don Juan Carlos se da en el 1 ó 2 por ciento de los casos y que el éxito de la cirugía a la que se someterá ahora al jefe del Estado está prácticamente asegurado en el 92-94 por ciento de las operaciones.
Esta intervención quirúrgica será la octava a la que se somete el Rey en los últimos tres años y medio, la mayoría de ellas de carácter traumatológico, derivadas de accidentes o problemas de desgaste en el sistema óseo, y con ella ya son trece las operaciones a que Don Juan Carlos se ha sometido a lo largo de su vida.
La Clínica Mayo, donde trabaja actualmente Cabanelas, es considerada unas de las mejores instituciones hospitalarias de Estados Unidos y una de las más reconocidas del mundo en las especialidades de ortopedia, neurocirugía, cardiología y cáncer.
Con 43.820 empleados, este año la revista Forbes incluyó a la Clínica Mayo, una vez más, en su ránking de los 100 mejores lugares del país para trabajar, en el puesto 41 y la segunda dentro del sector sanitario privado.
Esta organización hospitalaria, con sedes en los estados de Florida, Minesota y Arizona, no tiene ánimo de lucro y fue fundada en 1889 por el doctor William Worrall Mayo y su hijo Charles Horace Mayo.
En 2012 tuvo unos ingresos de 8.800 millones de dólares por sus actividades médicas y está considerado el mejor centro hospitalario del medio oeste estadounidense.
Las instalaciones de Rochester disponen de más de 1.100 camas, atienden unas 350.000 consultas y realiza más de 70.000 intervenciones quirúrgicas anuales, al tiempo que sirve como centro de investigación y formación de doctores y especialistas.