Sobre el accidente de Santiago, las comparecencias -el jueves- en el Congreso de los presidentes de Renfe y ADIF dejaron dos datos que han llamado la atención. El tren híbrido ALVIA S730 (ideado ex profeso para esta línea) era incompatible con el sistema de seguridad ERTMS y que tuvo que anularse dejando el trazado Orense - Santiago con el viejo sistema ASFA, insuficiente para un simple despiste del maquinista. Y que seis meses antes de la fecha prevista para la inauguración de la línea, el ministerio de Fomento de José Blanco modificó el proyecto inicial y decidió mantener el ancho de vía ibérico en ese tramo Orense - Santiago.
La medida permitió cumplir los plazos previstos y a José Blanco inaugurar la "Alta Velocidad" a Galicia en diciembre de 2011 , ya con las elecciones generales perdidas y como ministro en funciones . Un viejo anhelo de los gallegos, casi aislados, por tren durante años.
"Alta Velocidad" que -ahora se ha puesto de manifiesto- tampoco lo era, pero que para José Blanco -sin embargo- sí significaba la carta de presentación perfecta en su intento (fallido) de refugiarse en la política gallega tras la previsible derrota electoral en las generales .Una obra de ingeniería nada facil, como contaba Fomento en sus promocionales.Tampoco en el acceso a Santiago que aprovechaba la vieja vía. Una mezcla de viejos y nuevos trazados, con un nuevo tren, el ALVIA S730,. un hibrido entre eléctrico y diesel que permitía circular a 200 km /h y con todas las garantias de seguridad.
Todo apunta a que los plazos de inauguración del supuesto AVE a Galicia tuvieron un cálculo político . En septiembre de 2011, dos meses antes de inaugurar la línea, Blanco presentó el tren híbrido ALVIA S730. Presumió de que el tren era un proyecto personal suyo para llevar "cuanto antes" la alta velocidad a Galicia y de llevar seis meses de adelanto sobre los plazos previstos . Blanco afirmó -entonces- que el tren había pasado todas las pruebas de seguridad, aunque las incidencias fueron constantes desde el primer día. Faltaban entonces dos meses para unas elecciones que ya se sabian perdidas. Al acto no asistió nadie de la Xunta ni del PP.
El 10 de diciembre, perdidas las generales, y ya sí, con el presidente de la Xunta, Alberto Nuñez Feijoo y el ex ministro de Fomento, Alvárez Cascos, Blanco se mostraba satisfecho, de que la alta velocidad, sueño de tantos gallegos llegase por a fin a Galicia.