Ciudadanos y Partido Popular alcanzaron este miércoles un principio de acuerdo de gobernabilidad en Castilla y León. De este modo se despeja el camino para que el candidato del PP Alfonso Fernández Mañueco sea investido presidente de la Junta y a cambio Ciudadanos lograría poder institucional a través de la presidencia de alguna diputación y de alguno de los principales ayuntamientos de la comunidad, según informaron fuentes de la formación naranja.
La semana pasada ambas formaciones iniciaron en Valladolid el proceso negociador de un programa para gobernar Castilla y León, algo que pretenden hacer con un planteamiento de cambio y moderación del que aseguran se beneficiarán los habitantes de esta comunidad. En ese encuentro participaron, junto a los equipos negociadores autonómicos liderados por Alfonso Fernández Mañueco y Francisco Igea, los dirigentes nacionales Teodoro García Egea y José María Espejo.
Tras la reunión, Fernández Mañueco expresó su convencimiento de que llegarían a un “buen acuerdo” para conformar un Gobierno “moderado y de renovación” para la comunidad y se mostró convencido de que “no habrá ningún problema” con la regeneración que exige Ciudadanos porque están de acuerdo con la transparencia y la rendición de cuentas.