El expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont pide "la unidad del soberanismo" desde la cárcel de Neumünster (norte de Alemania), según explicó hoy su abogado, Jaume Alonso-Cuevillas, tras visitarle por primera vez en prisión.
El líder independentista es consciente, agregó el letrado, de que su estado de "privación de libertad" puede "prolongarse" mientras la justicia alemana examina la orden de detención y entrega (OEDE, euroorden) cursada por España con los cargos de rebelión y malversación de fondos, lo que provocó su detención este domingo poco después de entrar en territorio alemán desde Dinamarca.
La primera fiscal estatal de Schleswig, Wiebke Hoffelner, explicó hoy a Efe que el Puigdemont deberá permanecer en prisión como mínimo hasta que la Fiscalía General de Schleswig-Holstein decida si pide a la Audiencia Territorial de Schleswig que ejecute la orden de extradición, lo que tardará "algunos días". "Confiamos en la justicia europea y en la alemana", manifestó Alonso-Cuevillas en una breve comparecencia ante los medios después de entrevistarse con Puigdemont durante unas dos horas.
"Ha sido un chute de euforia verlo" así, con "tanta determinación y coraje", aseguró el abogado tras asegurar, en castellano y catalán, que Puigdemont está "en perfecta forma anímica" y "en excelentes condiciones físicas".
Apuntó que su defendido, que se considera un preso político, agradece las muestras de apoyo que está recibiendo.
Alonso-Cuevillas, que ya trató de reunirse con Puigdemont sin éxito en la tarde del lunes, explicó que después de que el tribunal de primera instancia decidiera mantenerlo en prisión, sin pronunciarse sobre el fondo de la cuestión, ahora se abre el proceso de extradición en sentido estricto.
El caso ha pasado a la Fiscalía General de Schleswig-Holstein, que debe estudiar la euroorden con ayuda de la documentación procedente de España.
Finalmente, puede pedir a la Audiencia Territorial de Schleswig la ejecución de la extradición o argumentar que no se cumplen las condiciones para dar este paso.
La presentación de ese escrito llevará "unos días, no semanas", aseguró a Efe Hoffelner, que explicó que el proceso es "relativamente rápido" y "podría estar antes de Pascua", aunque "es difícil de predecir".
Si la Fiscalía no considera que se cumplen los requisitos legales, Puigdemont quedaría en libertad, pero si defiende la ejecución de la euroorden, el político secesionista catalán quedaría en manos de la Audiencia Territorial. En esa instancia se decidirá, antes de la resolución definitiva del caso, si se mantiene la orden de prisión o si Puigdemont queda en libertad bajo ciertas condiciones (por ejemplo, sin pasaporte o con la obligación de presentarse ante la Justicia periódicamente).
Si la Audiencia no percibe obstáculos jurídicos y considera que la entrega a España es legalmente admisible, se procedería a la extradición.
La clave para una eventual extradición por el delito de rebelión está en determinar si hubo o no violencia en el proceso independentista, según expertos consultados por Efe.
Nikolaos Gazeas, catedrático de Derecho Penal y Derecho Europeo de la Universidad de Colonia, señaló que entre el delito de rebelión español y el delito de alta traición recogido en el artículo 81 del Código Penal alemán hay una "similitud estructural". Explicó que para que el delito se dé, es preciso que haya habido "violencia o amenaza de violencia" y para ello el derecho pone exigencias muy altas.
En esta línea, el profesor de Derecho Penal, Procesal y Europeo Martin Heger, de la Universidad Humboldt de Berlín, coincidió en que lo decisivo es determinar si en el intento de socavar el orden constitucional español hubo o no violencia, algo que es "cuestión de interpretación".
El juzgado de primera instancia que decidió mantener en prisión preventiva a Puigdemont señaló el lunes que "sin duda el contenido de la orden de detención europea contiene elementos que, examinados exhaustivamente, pueden llevar a la conclusión de que la extradición no sería legitima", pero en la misma declaración explicaba que "no hay aún evidencia" de que la euroorden "no esté justificada".
Se debe pues esperar a la resolución de la Audiencia Territorial de Schleswig, que, en todo caso, podría conceder la extradición por el delito de malversación de fondos públicos.
Puigdemont fue detenido el domingo por la mañana en el norte de Alemania, poco después de cruzar en coche la frontera con Dinamarca, cuando trataba de regresar por tierra a Bélgica tras una visita a Finlandia, durante la que el juez del Tribunal Supremo español Pablo Llarena reactivó la euroorden de detención en su contra.