El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado que no tiene "la más mínima duda" sobre la posición del PSOE respecto al proceso de abdicación del Rey, un momento ante el que ha solicitado a CiU que no haga una "política pequeña".
Y es que ya sabemos que votarán todos partidos el miércoles dia 11 cuando se debata en el Congreso la ley de abdicación. PP, PSOE y UPyD sumarán mas de 300 diputados a favor del sí. En contra, 18 votos: los de la izquierda minoritaria y los independentitas. El PNV y CiU ya han anunciado que se van a abstener.
Desde Portugal, Mariano Rajoy se ha referido a las voces del PSOE que piden un referéndum sobre el modelo de Estado y a la decisión de CiU de abstenerse en la votación de la ley que regulará la abdicación de don Juan Carlos, en la conferencia de prensa con la que se ha cerrado la XXVII cumbre hispano-lusa celebrada en la localidad portuguesa de Vidago.
El jefe del Gobierno ha destacado que el comportamiento de los dirigentes socialistas y, fundamentalmente, de su secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras la decisión del Rey de abdicar, ha sido "serio, ejemplar y con sentido de Estado".
"Por tanto -ha dicho- no tengo la más mínima duda sobre cuál va a ser la posición del PSOE en las próximas fechas". Además, ha rechazado la hipótesis de que el Rey haya acelerado su decisión de abdicar para hacerlo antes de que Rubalcaba abandone el liderazgo del partido.
En ese sentido, ha subrayado que el Rey ha explicado "clarísimamente" cuáles son las razones por las que abdica en este momento. "A mí ya me lo había comunicado como es sabido hace algunos meses y, por tanto, no tiene absolutamente nada que ver con ese asunto", ha señalado en referencia al proceso interno del PSOE.
Frente a su elogio a los socialistas, el presidente del Gobierno ha instado a CiU a hacer en este momento una política de altura. "El momento que estamos viviendo es muy importante en la vida de la nación española y el Gobierno ha actuado con transparencia y con lealtad, informando a todos los grupos políticos y nadie ha sido ignorado ni preterido", ha señalado en alusión a las quejas de CiU.
A esta formación política ha dirigido otro mensaje ante su decisión de abstenerse en la votación de la ley que regulará la abdicación. "Todo el mundo -ha precisado- puede tomar las decisiones que estime oportuno y conveniente en base a su historia, su libertad, su trayectoria o sus propios intereses, pero lo único que me gustaría es que en una ocasión como esta no hiciésemos política pequeña".
LA REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN NO ES PRIORITARIA
Rajoy ha querido dejar claro que "España es por fortuna una democracia avanzada, con unas instituciones fuertes que van a estar a la altura de las circunstancias y con un cuerpo legislativo que se va a cumplir".
Ante una pregunta sobre la futura regulación de la figura del Rey ante la Justicia una vez que pierda la inviolabilidad de que ha gozado en el trono, Rajoy ha explicado que próximamente se aprobará una ley que regulará la situación de don Juan Carlos.
"Es evidente que el Gobierno aprobará con el contenido y en la fecha que se les explicará a todos ustedes en su momento, la norma que regule la figura del Rey que ha abdicado", ha añadido.
Rajoy ha aprovechado también para reiterar que no considera prioritario para España una reforma de la Constitución. "Si alguien quiere plantearla tiene que decir exactamente qué es lo que quiere hacer y cuál es su objetivo, porque decir una cosa que no significa nada tiene poco sentido", ha añadido.
Pero ha insistido en que España tiene otras prioridades como son el crecimiento económico, la creación de empleo, la mejora del bienestar de los ciudadanos y bases sólidas para el futuro de España con el fin de que no vuelva a suceder nunca más lo que ha sucedido a lo largo de los últimos años.
A la situación generada por la abdicación del Rey se ha referido también el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, en la conferencia de prensa que ha compartido con Rajoy.
Tras expresar su reconocimiento a don Juan Carlos y desear éxito al Príncipe, ha señalado que la confianza de Portugal en las instituciones españolas "es total".
"España es una democracia suficientemente avanzada y madura" para afrontar situaciones como la que ha surgido, ha subrayado Passos Coelho, quien ha dicho que no le corresponde a él valorar el posible impacto del proceso de abdicación en la democracia española.