Rajoy lleva a la cumbre de la Unión Europea su compromiso con el déficit
Propuestas con las que quiere ponerse al frente de la lucha contra la crisis y el desempleo
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se estrenará mañana en una cumbre de la Unión Europea con un mensaje de compromiso total con las previsiones económicas comunitarias y con independencia de las modificaciones que pueda haber en ellas, aunque España desea que cuanto antes haya unas cifras "realistas".
Rajoy viajará a Bruselas para participar en su primer Consejo Europeo y lo hará con una serie de medidas ya aprobadas, o en cartera, que el Ejecutivo considera que certifican la fiabilidad de España y con una serie de propuestas, con las que quiere ponerse al frente de la lucha contra la crisis y el desempleo.
Según fuentes del Gobierno, desea dejar claro ante sus socios comunitarios que España va a mantener el rigor presupuestario y, ante ese objetivo, parte con ventaja en relación con la mayoría de ellos debido a que ya ha incluido ese compromiso en la Constitución.
De hecho, el último Consejo de ministros aprobó el anteproyecto de ley que desarrolla la ley de estabilidad presupuestaria y que fija techos de gasto para las administraciones.
El Gobierno garantiza su total compromiso con las cifras económicas que se fijen por parte de la Comisión Europea y que, en la actualidad, entre otras previsiones, fijan un déficit en España del 4,4 por ciento para 2012.
Sin embargo, esta es una cifra que se da por hecho que será revisada debido a que está calculada conforme a unas previsiones de crecimiento mayores de las que ahora son posibles.
La Comisión Europea ha de modificar esas previsiones (lo hará oficialmente el próximo 23 de febrero) y el Gobierno está a la espera de lo que concrete para volver a reiterar su pleno compromiso con ellas, pero desea que este asunto se aborde cuanto antes para trabajar con datos "realistas".
De ahí, que el Ejecutivo vería con buenos ojos que este asunto estuviera sobre la mesa de la cumbre de mañana, donde puede plantearse por el propio presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.
"El compromiso de España con el déficit que se fije es sagrado, y ahora ese déficit está previsto en el 4,4 por ciento", se reitera desde el Gobierno ante la posibilidad de que se actualice ese porcentaje.
Pero insisten en la conveniencia de que haya datos realistas que sustituyan a las previsiones "irreales" y con los que el Gobierno desarrolle el proyecto de ley de Presupuestos de este año y sus objetivos de estabilidad.
El primer desplazamiento de Rajoy a Bruselas como jefe del Gobierno llega pocos días después del acuerdo de empresarios y sindicatos en materia salarial para los próximos años.
Un pacto que lleva al Gobierno a ensalzar la responsabilidad que han demostrado los agentes sociales (lo que también hizo la canciller alemana, Angela Merkel, el pasado jueves) y su apuesta por que España recupere competitividad.
La reforma del sector financiero y la reforma laboral serán próximos pasos que el Gobierno considera que servirán para ganar credibilidad en la UE y en los mercados.
Todo ello, según las fuentes del Ejecutivo, permitirá a Rajoy estrenarse en Bruselas "con una buena tarjeta de visita"
Pero no sólo expondrá lo que está haciendo el Gobierno español, ya que hará propuestas a sus socios. En concreto, tres.
La primera es que los excedentes de los fondos estructurales y de cohesión se destinen a programas que sirvan para generar empleo, y la segunda, el inicio de una reflexión sobre el denominado "modelo austríaco" para que los trabajadores destinen una parte de su cotización al desempleo a una "mochila" que puedan trasladar cuando cambien de trabajo.
A ellas sumará la petición de que los directivos de las entidades financieras que hayan recibido ayudas públicas tengan una remuneración armonizada en todos los países.
En el Consejo de mañana, los líderes de la UE analizarán tres comunicaciones sobre empleo, mercado único y pymes, y está previsto que Rajoy sea uno de los dos ponentes de la relativa a las pequeñas y medianas empresas.
La agenda del presidente del Gobierno en Bruselas incluye antes del Consejo una reunión con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y otra con la presidenta de turno, la primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt.
Además, a la espera de que se concreten, es previsible que durante la cumbre mantenga sendas reuniones con el primer ministro británico, David Cameron, y con su homólogo polaco, Donald Tusk.
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